Rosario, Argentina - 1º de Mayo
Acto Anarquista en Plaza Libertad - 16 hs.-
"Por la Anarquía y la revolución social"
Miércoles 1º de Mayo desde las 16 hs en Plaza Libertad (Sarmiento y Pasco)
Oradores, Feria de publicaciones, Música, Exposición de fotos de proyectos autogestivos de la región y mas...
convoca y organiza Columna Libertaria Joaquín Penina
A continuación difundimos documento de la organización
Con organización y lucha construiremos un mundo sin dominación
Rosario 1º de Mayo de 2013
“repito que soy enemigo del orden de hoy y repito que con todas mis fuerzas, mientras tenga aliento para respirar, lo combatiré. Los desprecio. Desprecio su orden, sus leyes, su autoridad apuntalada por la fuerza. Ahórquenme por ello”.[1]
Louis Lingg – Martir de Chicago
La primera reacción de los/las anarquistas de Chicago ante el acuerdo de la Federación de Trabajadores de los Estados Unidos y Canada, por el cual declaraban para el 1 de mayo de 1886 la huelga general en pos de las 8 hs de trabajo, fue combatirla por juzgarla insuficiente y ser partidarios de ir derechamente por la revolución[2]. Más tarde comprendieron la necesidad de apoyar la huelga, ya que de acuerdo a la lectura del contexto social del momento, en ella no estaba solo en juego una mera reforma, sino que existía además una profunda disputa de sentidos, valores y proyectos de sociedad.
Las consignas que hacían referencia a las 8 hs de trabajo, 8 hs para descansar y 8 hs de oseo, implicaban desde esta óptica, la necesidad, de quienes estaban luchando, de empezar a tomar la riendas de sus propias vidas, de elegir cual es el sentido del tiempo, del trabajo, y de la vida social en general, también en este sentido podemos destacar que en los mitines y huelgas que se dieron en los primeros días de mayo de 1886 los principales oradores eran anarquistas, que pronunciaban los mas encendidos discursos en contra del orden establecido y en pos de la construcción de una sociedad de iguales, ante miles de huelguistas movilizados.
La clase dominante del momento también hizo esta lectura sobre lo que estaba en juego en esos días de mayo, y así una feroz represión, y persecución por parte del estado cayo sobre quienes se habían movilizado en esos días dejando un saldo de varios muertos y encarcelando a quienes mas tarde se conocerían como los mártires de Chicago.
El juicio recaído sobre los anarquistas de chicago tenía el objetivo de disciplinar a la movilización popular y criminalizar lo más posible a la ideología anarquista. Pero para mantener la fachada de las “libertades individuales”, el estado no puede expresamente criminalizar a los luchadores sociales, para eso entonces fuerza sus propios mecanismos hasta el borde del ridículo, pagando a testigos, manipulando a la “opinión publica” a través de los medios de comunicación, y muchas otras formas que, como vemos a la luz de los hechos actuales, no han cambiado demasiado con el tiempo y quienes somos luchadores/as sociales conocemos bien de cerca.
Siguiendo los discursos que los mártires de chicago dieron durante sus juicios, mas con la intención de hacer una declaración de guerra al sistema, que con la intención de salvarse de una condena, vemos que estos compañeros/as nos hablan desde un momento histórico que es significativamente distinto al actual. El imaginario obrero de la época estaba compuesto de algunas certezas que las experiencias practicas, surgidas al calor de las luchas, habían logrado articularlas en proyectos de sociedad que estaban en disputa con el sistema: Asi ” Las luchas frontales, las condiciones crueles de vida, la solidaridad grupal, despertaron sueños que tenían que ver con la emancipación social. Elementos ideológicos antagónicos al sistema animaron luchas inmediatas y sueños futuros. Estaban nucleados en grandes fabricas y sindicatos, y un sentimiento de fuerza y pertenencia a algo distinto al sistema estaba allí, latente, mezclados con otros ingredientes…”[3]
Claramente el proceso de lucha de la época había hecho surgir un sujeto revolucionario, con capacidad de ruptura con el sistema, sujeto que identificamos nosotros como clase oprimida, que en ese momento se destacaba por estar organizada en torno al trabajo y sus organizaciones tomaban la forma de sindicatos.
Esta mirada del 1 de mayo, desde un análisis clasista, nos sugiere que lo que estaba en juego en ese periodo histórico( en el que se enmarca la revuelta de Haymarket), era la continuidad del sistema y la construcción de otra sociedad y no simples reformas y es esto justamente lo que desde las distintas usinas ideológicas de la dominación se trata de ocultar, mostrándonos una historia en donde a lo sumo se luchaba por un capitalismo mas humano, y en este sentido se nos trata de ocultar además, los puntos de contacto y de continuidad entre los procesos de lucha y resistencia históricos y los actuales.
Continuidad que esta dada para nosotros/as por la continuidad de un hacer humano, de una voluntad diría Malatesta, que lucha, busca y crea en distintos momentos, con distintas herramientas, y con grados de visibilidad variables, un mundo donde prime la libertad y la igualdad, una sociedad anarquista decimos nosotros.
Los anarquistas y la construcción de una estrategia de ruptura revolucionaria desde abajo y contra el estado:
El momento histórico actual nos sugiere a simple vista grandes diferencias con lo que ocurría a principio del siglo XX: “En esta etapa el capitalismo ha logrado una globalización sin precedentes. Ha extendido su política neo-liberal a gran parte del planeta. Sus organismos internacionales actúan con una coherencia aplastante…” “… mientras estos mecanismos fundamentales funcionan aceitadamente, con cohesión, en beneficio de un reducido grupo de poderosos, al mismo tiempo producen un efecto de fragmentación hacia abajo. Se fragmenta el mundo del trabajo, los lazos solidarios, la vida social, la propia situación de lo pobres…”[4]
En esta etapa, la cual ofrece grandes dificultades para nuestros fines, desde la CLJP consideramos que tenemos que aportar a la construcción de una estrategia de ruptura con el sistema de dominación, y para ello necesitaremos de organización, en todas las esferas de la vida social, para transformarla radicalmente.
En este sentido entendemos que la construcción de una fuerza social de carácter autogestivo es indispensable si queremos derrotar a la clase dominante, y para esto, ese proceso debe darse con claridad de cuales son las instituciones, mecanismos y dispositivos que reproducen al sistema y su estructura de relaciones sociales de mando-obediencia. Así, consideramos al estado una institución central en la reproducción de la dominación y por eso descartamos todos los caminos de lucha que relativicen su rol, en pos del pragmatismo, del realismo o de supuestas contradicciones principales de la etapa.
Siguiendo a Malatesta consideramos que un elemento esencial de nuestra estrategia de ruptura es la organización. Desde nuestra visión es necesario construir y participar en organizaciones donde luchemos junto con nuestros hermanxs de clase por aquellas reivindicaciones tan sentidas y tan necesarias en un contexto donde el neo-liberalismo (que en la región toma la forma extractivo-exportadora) ,de manera cada vez mas inhumana, precariza la vida social; reivindicaciones que como dijimos mas arriba no son meras reformas, ni son simplemente económicas, sino que su conquista se enmarca en el proceso de lucha y de construcción de una subjetividad individual y colectiva que este en constante disputa con el sistema.
Y por otro lado consideramos al anarquismo como una praxis histórica de los oprimidos, que tiene como resultado la construcción de un proyecto de sociedad que propone la primacía de la autogestión en todos los niveles de la vida social. Para alcanzar este horizonte de autogestión vemos a la organización política de los anarquistas como un potenciador de las prácticas autogestivas, y hacemos así de ella un elemento necesario en nuestra estrategia.
Este es el camino que elegimos para construir un mundo sin dominación, para construir ese horizonte de libertad, y que como los mártires de chicago, otros tantos compañeros/as de nuestra historia dieron la vida por ello, y que hoy nos corresponde a nosotros/as comprometernos con esta causa y jugarnos por ella.
Por la Anarquia y la revolución Social!!
Viva el 1 de mayo!!
Columna Libertaria Joaquín Penina