A continuación extractos de diferentes fuentes sobre el accionar del Anarquismo durante las décadas del 60, 70 y 80 en latinoamerica. El correspondiente a Uruguay fue extraído de nodo50.org/fau.
Uruguay
De nodo50.org/fau.
La historia de FAU se vincula
con otra historia: la del anarquismo en el Uruguay que arranca ya desde la
década de 1870. Es el anarquismo fundador de la mayoría de los primeros
sindicatos; su prensa es quien difunde las nuevas ideas socialistas y
libertarias en nuestro país; es fundador de la primera Federación obrera; sus
ideas y prácticas revolucionarias dejan una impronta en la historia del
movimiento popular donde algunos de sus rasgos perduran hasta nuestros días.
Precede a la FAU esta historia y lo que hay
concretamente de expresión libertaria en la década del 50: presencia en
sectores obreros y estudiantiles. Habla de ello la lucha antifascista y
tercerista en el medio universitario, una serie de conflictos obreros con
incidencia de acción directa y poco más adelante la lucha de los gremios
solidarios de 1951-52.
La FAU es fundada en octubre de 1956 y en ella confluyen militantes sindicales, barriales, así como sectores juveniles y estudiantiles agrupados en las Juventudes Libertarias, también algunos militantes españoles refugiados aquí.
La FAU es fundada en octubre de 1956 y en ella confluyen militantes sindicales, barriales, así como sectores juveniles y estudiantiles agrupados en las Juventudes Libertarias, también algunos militantes españoles refugiados aquí.
La nueva Organización, como
intento de organizar políticamente a los anarquistas uruguayos, debe actuar en
un país y en un continente que comienza a verse sacudido por la crisis y por la
profundización de la lucha popular, y donde la injerencia imperialista,
especialmente la de Estados Unidos, se hace cada vez mayor y enfrenta crecientes
resistencias. Está la reciente instrumentación yanqui del golpe de estado
contra los planes de reforma en Guatemala. Son también los años de la
"guerra fría", de la invasión a Hungría por las tropas rusas, de la
intervención franco-anglo-israelí como respuesta a la nacionalización del Canal
de Suez y de las triunfantes guerras de liberación contra el colonialismo en
Africa y Asia.
La FAU se desarrollará anclada en la tradición revolucionaria bakuninista, en las posiciones organicistas que tuviera Malatesta uno de sus portadores más reconocidos, en experiencias y epopeyas de la Revolución Española, de cierta influencia clasista del anarcosindicalismo y tomando la tradición de los métodos de acción directa. Al mismo tiempo, la Organización y sus militantes son conscientes de que su actividad se debe desarrollar en un continente y en un país con las características específicas de lo que comienza a ser llamado Tercer Mundo. Nuestra militancia tiene presente el momento histórico, el nuevo contexto en el que debe desarrollar su acción, la necesidad que ello conlleva de ubicar los problemas de este tiempo, con cabeza propia, para operar en consecuencia.
La FAU se desarrollará anclada en la tradición revolucionaria bakuninista, en las posiciones organicistas que tuviera Malatesta uno de sus portadores más reconocidos, en experiencias y epopeyas de la Revolución Española, de cierta influencia clasista del anarcosindicalismo y tomando la tradición de los métodos de acción directa. Al mismo tiempo, la Organización y sus militantes son conscientes de que su actividad se debe desarrollar en un continente y en un país con las características específicas de lo que comienza a ser llamado Tercer Mundo. Nuestra militancia tiene presente el momento histórico, el nuevo contexto en el que debe desarrollar su acción, la necesidad que ello conlleva de ubicar los problemas de este tiempo, con cabeza propia, para operar en consecuencia.
Va estudiando temas,
desarrollando su accionar, sorteando dificultades, teniendo aciertos y errores
en esa fluida lucha social que un momento histórico revuelto plantea. Una
obsesión lo empuja: poner en escena una propuesta y una ideología que considera
totalmente vigente. Vendrán dificultades internas que serán rápidamente
superadas y que no impiden la continuidad de la estrategia libertaria diseñada.
Para la burguesía un modelo de
país entra en crisis y se intentará el reacomodo suprimiendo derechos y
conquistas obreras y populares. La represión se intensificará y será en tal
coyuntura un instrumento principal de la estructura dominante para efectivizar
el modelo que le permita seguir adelante con sus brutales privilegios. Desde el
poder, un giro hacia la derecha intenta avanzar a fondo. Los enfrentamientos
populares a la regresión y represión se hacen frecuentes. Frente a la situación
que se vive cree la
Organización necesaria la adopción de formas organizativas
que le permitan llevar adelante las diversas actividades que encara: públicas
algunas y también semiclandestinas o clandestinas otras. Un Decreto del gobierno
declara ilegal a la FAU,
junto a otras organizaciones, a fines de 1967. Esto no toma de sorpresa a la Organización y puede
entonces continuar el conjunto de sus acciones, incluso aumentar su
crecimiento.
Mantuvo entonces una actividad
regular y en aumento su incidencia político-social hasta el momento mismo de la
llegada de la dictadura. Desde 1964 en adelante su coherencia y eficacia
resultó mucho mayor. Fue creadora y dinamizadora de frentes de trabajo que
lograron presencia y peso a nivel nacional, fundamentalmente a nivel de su
capital. Participó activamente en la fundación de la CNT. Coordinó
internamente y con otras fuerzas su participación en el importante Congreso del
Pueblo. Hizo el llamamiento para la creación de la Tendencia Combativa.
Integró el Coordinador, organismo con preferencia de lucha armada, con
organizaciones como MLN, MIR y otros.
Participó, junto a otras fuerzas
políticas, en un diario de cierta relevancia: "Epoca", que expresaba
a la izquierda de tono combativo. Jugó FAU parte activa en la elaboración de un
documento que permitiera una acción conjunta, en importantes zonas
estratégicas, a estas fuerzas que integraban el diario.
Sufrió diversos golpes,
compañeros presos y torturados, la propia organización legalmente perseguida durante
casi cuatro años. Hasta 1971 la
FAU realizó su actividad desde una situación de
clandestinidad. En este periodo algunos de sus locales clandestinos cayeron y
algunos de sus militantes tuvieron que actuar totalmente en la clandestinidad
pues aparecían públicamente requeridos. Por momentos tuvo a más de la mitad de
su Junta Federal detenida en cuarteles.
La FAU que ya había logrado
desarrollar formas organizativas y de actividad que le permitieron mantener su
funcionamiento, ya sea en los distintos sindicatos donde nuestros militantes
actúan, en los organismos de dirección de la CNT, en el movimiento estudiantil, en tareas
políticas, de acción directa armada, en la lucha ideológica contra el
reformismo y el colaboracionismo obrero, fundamentalmente expresado por el
Partido Comunista. Logra sacar y distribuir su prensa semanalmente durante todo
el tiempo de clandestinidad: "Cartas de FAU". También en condiciones
de clandestinidad realiza eventos internos consultivos y resolutivos, incluso
de cambio en su Junta Nacional. De no menos importancia es la discusión y
acuerdos puntuales con otras fuerzas revolucionarias; manteniendo nuestra
independencia ideológica y política. Es de destacar que en este periodo, la Organización tiene un
importante crecimiento. En 1968, ya en la clandestinidad, después de una
decisión orgánica que previamente realiza evaluaciones estratégicas, a
iniciativa de nuestro militantes, distintos grupos obreros y estudiantiles dan
vida a la ROE
(Resistencia Obrero-Estudiantil) que actuará con amplitud pero también como
frente externo y de masas de la proscripta FAU. En la ROE actúan militantes de FAU
con distinto grado de responsabilidad en la dirección de los sindicatos tales
como industria del caucho, gráficos, bancarios, del gas, puerto, industria
metalúrgica, textiles, industria química, refinerías de petróleo, transporte,
sanidad, industria alimenticia, ferrocarriles, empleados de la Universidad, etc. Los
estudiantes son fuertes fundamentalmente en el Instituto de Magisterio, entre
los estudiantes de Enseñanza Secundaria, pero débiles en la Universidad donde sólo
están presentes en pocas Facultades (Humanidades y Medicina).
El peso de la Organización en el
movimiento obrero y popular reviste importancia. Marca una línea de trabajo
combativo y cuestionador del sistema. Fue puntal del trabajo de Tendencia que
nucleara a los partidarios de formas de trabajo no burocráticas, participativas
y movilizadoras. No descuidó la polémica con el reformismo, fundamentando
permanentemente el porqué? de su accionar político distinto. Paralelamente a la actividad de masas, a
determinada altura, actuará la OPR
(Organizaci¢n Popular Revolucionaria), aparato armado de la FAU que llevará adelante con
bastante éxito una serie de acciones (sabotajes, expropiaciones económicas,
secuestros de dirigentes políticos y patronales particularmente odiados por el
pueblo, apoyatura armada a huelgas y ocupaciones de fábricas, etc.). La FAU inserta su acción armada
en una óptica política e ideológica muy distinta de la de la mayoría de los
movimientos de liberación latinoamericanos, en gran medida influenciados por el
castrismo cubano y los teóricos del "foco guerrillero". El accionar
de la FAU a
través de la OPR
tiene más bien algún parentesco con el de los compañeros de los grupos armados
españoles vinculados a la FAI
(Federación Anarquista Ibérica) de la década de los 20-30. Claro está que
acusando recibo adecuado del contexto histórico que debe
enfrentar y de la articulación global que deben tener sus distintas instancias
militantes.
Se establece para el aparato armado sólo autonomía táctica, todos
los operativos político-sociales son resueltos por la instancia política
global. Se estima que su desarrollo y el tipo de violencia que ejecute deben
guardar relación con el desarrollo de la lucha global del movimiento
obrero-popular en el país.
Se procura evitar niveles de
violencia que queden fuera de contexto y aislen. Al mismo tiempo se toman una
serie de medidas de funcionamiento para prever y con miras a evitar deformaciones
"militaristas". Combatir toda cultura de obediencia. El país sufre
una profunda crisis económica y política, la "clase política" no da
repuesta a los problemas urgentes que el mantenimiento del sistema plantea. Hay
en el país ya instalada una dictadura constitucional. El movimiento
obrero-popular responde ante el quite de libertades y derechos. Organizaciones
de combate marcan cierta presencia. Es todo un periodo de fuerte represión y
enfrentamientos sindicales y populares. Entra el Ejército en escena y
hegemoniza la represión. En diferentes lugares, también en el Parlamento, hay
denuncias de brutales torturas en los cuarteles. Las llamadas "Fuerzas
Conjuntas" (Ejército y policía) suman a su labor de represión física una
labor de tipo ideológico, tratan de difundir confusión y miedo a través de
comunicados puestos en los distintos medios de comunicación que utiliza.
En dos o tres meses la represión
prácticamente desmantela el MLN (Tupamaros). En un marco inseguro y de descenso
de las luchas, con inminente amenaza de dictadura, la Organización evalúa
la situación y considera necesario replegar parte de su fuerza. Hay en ese
momento una treintena de compañeros en condiciones de clandestinidad. Los
compañeros de OPR se cuentan entre los primeros que la organización evacúa.
Ellos se encargarán en lo inmediato, en la Argentina, de lograr los medios económicos para
una lucha contra la dictadura que se prevé larga. Se estima que la Organización debe
tomar las medidas pertinentes que permitan durar en el tiempo. "Durar
haciendo, durar luchando" se dirá por ese entonces. En Junio de 1973 con
la implantación de la dictadura militar, se completa el proceso de tiranización
del país en un continente marcado por la presencia de dictaduras militares en
Brasil, Chile, Bolivia, Paraguay, etc. Ya en ese momento centenares de presos
políticos pueblan las cárceles de Uruguay, la mayoría de las organizaciones
revolucionarias han sido diezmadas. La
FAU vuelca todos sus esfuerzos en la huelga general que
durante quince días paralizará el país. Debe redoblar esfuerzos ya que la
fuerza mayoritaria, el PC, repliega, en ese momento, gran parte de su fuerza
militante y procura determinado diálogo con los militares. La huelga general
sobrevive en la memoria de los trabajadores uruguayos como ejemplo de su
decisión de lucha.
En estas condiciones, la FAU ordena ahora la evacuación
de la mayoría de sus militantes hacia Buenos Aires, donde ya se encuentran los
"más quemados", parte de la Junta Federal y los compañeros de la OPR, con la intención de
iniciar desde ahí las tareas políticas que impone la resitencia contra la
dictadura. En parte del año 73 y durante 74 y 75 la Organización
desarrolla una importante labor desde la Argentina. Apuntalando
el trabajo en Uruguay, logrando los medios materiales necesarios para sostener
una larga resistencia. Militantes en Uruguay y militantes en el exilio ven a la Organización como una
expectativa real. Comienza en ella en estos años un proceso hacia una apertura
política que de cabida a mucha militancia que no procede del anarquismo. Un
Congreso definirá una posición que apunta a tal objetivo. De cualquier manera
se mantiene una estrategia de intención revolucionaria, antielectoralista y de
matriz libertaria. Pero la situación Argentina se deteriora rápidamente. En
setiembre de 1976 los militares toman el poder e instauran allí una brutal y
genocida dictadura. Acorralados por la represión de los servicios especiales
del ejército argentino y del uruguayo, operando el Plan Cóndor, una cincuentena
de compañeros son asesinados y "desaparecidos", luego de soportar
indescriptibles torturas, otros tantos son condenados a largos años de prisión.
Dentro de los asesinados se encuentran compañeros viejos de decisiva
gravitación para el accionar del conjunto de la organización, por ejemplo
Gerardo Gatti, León Duarte, Alberto Mechoso. Compañeros de formación
intelectual y emotiva anarquista. El gran golpe sufrido genera dispersión,
confusión y sensación de derrota. Una gran pérdida humana y militante que
dejará profundas huellas en esta historia. La FAU, llevando en sus entrañas aquel periodo de
lucha y en el mejor de los recuerdos a aquellos compañeros caídos seguirá el
derrotero libertario hasta nuestros días.
Además de la existencia de
FAU-OPR33, otro grupo de libertarios decidieron fundar el Partido Por la Victoria del Pueblo –PVP-
así como también sumarse al Movimiento 26 de Marzo del MLN-Tupamaros.
Argentina
A continuación extracto de la Introducción de Chuck Morse a entrevista a
Fernando Lopez Trujillo, 13 de octubre de 2002. Traducida del inglés al español
por Frank Mintz.
La confluencia mas conocida de
grupos libertarios fue Resistencia Anticapitalista Libertaria, donde se fusionaron
grupos como Línea Anarco Comunista, Grupo Anarquista Revolucionario, Acción Directa, Organización Anarquista
y Resistencia Libertaria La
Plata. “Resistencia Libertaria (RL)
era activa en los movimientos estudiantil, laboral y barrial y también tenía un
ala militar con la que defendió y financió sus actividades. En su mejor
momento, tenía entre 100 y 130 miembros y una red mucho mayor de simpatizantes.
La organización fue diezmada en 1978 y el 80 % de sus miembros pereció en los
campos de concentración y las cámaras de tortura de la dictadura.”
Chile
En este país se pudo desarrollar
la experiencia de autodefensa de pobladores conocida como Brigadas del Pueblo
conformada por militantes libertarios a fines de los `70. También se pudo
conocer la participación de anarquistas en la Vanguardia Organizada
del Pueblo y el MIR a fines de los `60.
Brasil
A fines de los 60 la dictadura brasilera logró
perseguir y encarcelar a militantes del Movimento Estudantil Libertário quienes
ya habían empezado a practicar una alternativa revolucionaria como resistencia.
Por otro lado hacia fines de los 70 podemos mencionar a los grupos en torno al
periódico “O Inimigo do
Rei”, actuantes en São Paulo, Bahia, Río de Janeiro y Rio Grande do
Sul.
Perú
Extraído de "Historia del MRTA", periódico Voz Rebelde,
nadir.org/nadir/initiativ/mrta/
Durante la génesis del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru
(MRTA) podemos encontrar participación de posiciones y tendencias anarquistas.
Como se detalla en el texto de la Comisión Política del MRTA, hacia 1982 cuando se
estaban definiendo las estrategias revolucionarias que se iban a utilizar, se
expresaron “marcadas reminiscencias
anarquistas que pretendía (…) un golpe de mano liderado por dirigentes
gremiales”.
Así mismo dirigentes del MRTA como Néstor Cerpa Cartolini y Miguel Rincón
Rincón reconocían influencias del anarquismo en sus pensamientos.
Colombia
Llegados los años ochenta, en Colombia
muchos libertarios deciden entrar a formar parte de las distintas guerrillas,
principalmente el ELN, donde ingresa la organización anarquista Antorcha
Libertaria. Aunque en mucha menor medida también algunos libertarios se unieron
a las FARC o al M19. Además podemos destacar la lucha del Comité Regional
Indígena del Cauca (CRIC) de pueblos originarios Nasas, quienes mantienen
durante todos los `80 una insurgencia armada en el valle de Cauca a través de
su organización Movimiento Armado Quintín Lame. Habiendo abandonado las armas a
principios de los `90 actualmente estos pueblos se organizaron en asambleas
autogestionadas y federales denominadas Asociación de Cabildos Indígenas del
Norte del Cauca.