A continuación dos extractos sobre resistencia contra el fascismo en italia y la participación anarquista. El primero es un material extraído de Barricada Libertaria (barricadalibertariaweb). El segundo es un extracto del trabajo de Giorgio Sacchetti,
publicado en "Umanitá Nova" el 7 de Abril de 1985, traducido al
inglés como folleto por la
KSL. Traducido al español por Manu García en Agosto de 2004 y
publicado en Foro de Alasbarricadas.org
“Arditi del Popolo: primera resistencia contra el fascismo”
Fundado en Roma a finales de junio de 1921 de una
escisión en la Associazione Nazionale Arditi d'Italia por parte de Argo
Secondari (anarquista). El AdP era una respuesta física a la acción de las
escuadras fascistas y fue bienvenido por todas aquellas zonas que habían sido
golpeadas por las escuadrias fascistas durante meses. Ganaron mucho apoyo entre
la clase obrera no politizada que veia sus acciones como una especie de
venganza y como algo esencial para su supervivencia.
Se crearon secciones del AdP en varias ciudades de
todo el país, a veces de nueva creación y otras sobre la base de grupos
preexistentes como la Lega Proletaria (vinculada al Partito Socialista Italiana
y al Partito Comunista d'Italia), el grupo paramilitar Arditi Rossi en Trieste,
el Figli di Nessuno [los Niños de Nadie] en Genova y Vercelli.
El gobierno de Bonomi estaba preocupado por el
ascenso de este fenómeno y preparó un acuerdo entre los socialistas y los
fascistas (el supuesto "Pacto de Pacificación").
El 6 de julio en los Jardines Botánicos de Roma hubo
una importante manifestación anti-fascista a la que asistieron miles de
trabajadores, e incluso fue comentada por Pravda y por Lenin (quien en esa
época estaba metido en su propia batalla con Bordiga del PDD'I). A los pocos
días de la manifestación, la estructura paramilitar del AdP se convirtió en una
organización extendida, de gran alcance con raíces que se extendían de Roma
hacia Génova y Ancona, cubriendo todas las ciudades principales entre ellas -
Civitavecchia, Tarquinia, Orbetello, Piombino, Livorno, Pisa, La Spezia,
Monterotondo, Orte, Terni, Spoleto, Foligno, Gualdo Tadino, Jesi, pero también
lugares más lejanos como Parma, Piacenza, Brescia, Bérgamo, Vercelli, Turín,
Florencia, Catania y Taranto e incluso pueblos muchos más pequeños.
Números
Considerando sólo aquellas secciones cuya existencia
es segura, la organización anti-fascista tenía al menos 144 secciones (verano
1921) con un total de aproximadamente de 20.000 miembros. El grupo más grande
eran las 12 secciones de Lazio con aproximadamente 3300 miembros, seguidos por
Toscana, 18 secciones con un total de 3000 miembros. Otras regiones iban así:
Umbria 16 secciones - 2000 miembros
Marche 12 - 1000
Lombardia 17 - 2100
Tre Venezie 15 - 2200
Emilia Romagna 18 - 1400
Liguria 4 batallones - 1100
Piamonte 8 batallones - 1300
Sicilia 7 secciones - 600
Campania 7 - 500
Apulia 6 - 500
Cerdeña 2 - 150
Abruzzo 1 - 200
Calabria 1 - 200
Estructura
militar
El AdP tenía una estructura militar muy ágil, capaz
de juntar sus fuerzas rápidamente en preparación de las expediciones punitivas
fascistas. También intentaron controlar el territorio marchando por calles de
ciudad, algo parecido a una patrulla de barrio. La estructura de la
organización fue concebida con aspectos militares más que políticos, estaba
organizada en batallones, divididos en compañías y escuadras. Cada escuadra se
componía de 10 miembros más el líder del grupo. Una compañía se formaba con 4 escuadras
y un comandante, un batallón de 3 compañías bajo un comandante de batallón.
Cada batallón tenía escuadras de bicicletas para asegurar la comunicación entre
el mando general, los batallones y otras zonas, como grupos de fábrica,
trabajadores del ferrocarril, trabajadores de las municiones etc. El
entrenamiento se llevaba a cabo mediante ejercicios.
El AdP no era una organización demasiado
centralizada. Permitían a cada Comité Regional de Dirección grandes niveles de
autonomía. Claramente, la corriente política dominante de cada grupo dictaba su
comportamiento. En la práctica, cada sección decidía autónomamente qué hacer y
cómo hacerlo. Como consecuencia de su independencia política, normalmente los
miembros del AdP no estaban organizados en base a la pertenencia a ningún
partido o movimiento de clase obrera, aunque en algunas áreas ciertas compañías
estuvieron divididas sobre esta base.
Símbolos
Muchos los símbolos usados por el AdP eran imágenes
de guerra - el símbolo oficial de la asociación era un cráneo rodeado por una
corona de laurel con una daga entre sus dientes y la divisa "A Noi!"
[¡A Nosotros!]. El sello de las Direcciones era una daga rodeada por una corona
de laurel y una rama de roble. La bandera del grupo de Civitavecchia era un
hacha que rompía el símbolo fascista (el fasces).
El AdP no tuvo un verdadero uniforme, sin embargo a
menudo llevaban jerseys negros, pantalones oscuros-grises y quizás una flor
roja en sus ojales.
Las canciones de la asociación eran también bélicas.
Su himno principal tenía como estribillo lo siguiente
"Siam del popolo - le invitte schiere/ c'hanno
sul bavero le fiamme nere/ Ci muove un impeto - che è sacro e forte/ Morte alla
morte - Morte al dolor"
"Somos del pueblo - las filas inconquistadas /
que tienen sobre sus cuellos negras llamas / nos mueve una fuerza - que es
sagrada y fuerte / Muerte a la muerte - muerte al dolor"
El último verso proclama:
"Difendiamo l'operaio/ dagli oltraggi e le
disfatte/ che l'Ardito, oggi, combatte/ per l'altrui felicità!"
"Defendemos al obrero / del ultraje y la ruina /
El Ardito combate hoy / por la felicidad de los demás!"
En septiembre de 1921 el periódico de la organización
" L'Ardito del popolo " publicó una versión más explícitamente
anti-fascista del himno, que comenzaba:
"Rintuzziamo la violenza/ del fascismo
mercenario./ Tutti in armi! sul calvario/ dell'umana redenzion./ Questa eterna
giovinezza/ si rinnova nella fede/ per un popolo che chiede/ uguaglianza e
libertà."
"Contenemos la violencia / del fascismo
mercenario / Todos en armas! sobre el calvario / de la redención humana / Esta
eterna juventud / se renueva en la fe / por un pueblo que exige la igualdad y
la libertad."
Los
participantes
Los organizadores de la asociación fueron,
dependiendo en parte de la tradición política de la zona en cuestión,
militantes en partidos políticos o movimientos subversivos o proletarios
-anarquistas, comunistas, socialistas maximalistas (en particular
TerceroInternacionalistas(?)), republicanos y también sindicalistas
revolucionarios. Además del deseo de reprimir la violencia de los camisas
negras por métodos militares, estas diferentes corrientes del movimiento obrero
estaban unidas por un entendimiento común del fascismo como una fuerza
reaccionaria. El factor de unión era por lo tanto social, no político. Sobre el
nivel social, la prevalencia del movimiento proletario era evidente en todas
partes de la asociación. Había muchos trabajadores del ferrocarril, obreros en
general y trabajadores de fábricas, labradores y trabajadores de los astilleros
junto con marineros y trabajadores de los puertos, trabajadores de la
construcción, empleados de correos y trabajadores del transporte público. Había
también miembros de las clases medias como oficinistas, estudiantes, artesanos
y otros profesionales.
Historia
Incluso cuando estaba siendo fundada la asociación,
ya llegaban sus primeros éxitos -la defensa de Viterbo contra el ataque de los
camisas negras de Peruggia- y en Sarzana donde aproximadamente 20 fascistas
resultaron muertos. Las escuadras de Mussolini fueron cogidas por sorpresa y el
movimiento fascista casi se escindió por las diferencias entre los fascistas
urbanos que eran más políticos y abiertos a acuerdos y los fascistas rurales
que estaban contra todo compromiso. Pero como consecuencia de la acción del
gobierno, el AdP raras veces recibió el apoyo de los líderes de las
organizaciones obreras y por espacio de unos meses se les obligó a reducir sus
fuerzas y a sobrevivir prácticamente en la clandestinidad en zonas como Parma,
Ancona, Bari, Civitavecchia y Livorno donde tuvieron algún éxito limitado en la
ofensiva fascista final durante la huelga general "legalitaria" de
agosto de 1922. Sin embargo la acción del gobierno y la magistratura dió sus
frutos -el AdP se redujo a aproximadamente 50 secciones con poco más de 6000
miembros.
La razón de esto reside no sólo en las medidas
anti-paramilitares del gobierno (que sólo afectaban a los grupos de defensa
proletarios, desde luego), las detenciones, los informes a las autoridades y la
actitud de la Magistratura, sino en particular en que los líderes políticos y
partidos fracasaron en apoyar, y de hecho obstruyeron activamente al AdP, por
varios motivos.
El PSI (excepto su fracción Tercero
Internacionalista(?)) era el principal partido obrero. Además de abrazar la
fórmula de la resistencia pasiva, se coronó a sí mismo firmando el supuesto
" Pacto de Pacificación " con los fascistas, una especie de acuerdo
de paz, en el que declararon su oposición a trabajar en el AdP.
El Comité ejecutivo del Partido Comunista de Italia
(PCd'I, el precursor del PCI) decidió que el AdP estaba basado en un objetivo
parcial y por lo tanto atrasado (esto es, la defensa del proletariado) y no era
por lo tanto suficientemente revolucionario. La defensa del proletariado sólo
podría ocurrir dentro de estructuras controladas por el partido. Sin embargo,
un gran número de comunistas (incluso, al principio, ciertos líderes como
Gramsci) no aceptó esto y permaneció dentro del AdP. Fue sólo después de las
amenazas del "centro" que la mayoría de los miembros del PCD'I
obedeció y abandonaron el AdP para unirse a las Escuadras de Acción Comunista,
elección que fue severamente criticada por la Internacional Comunista que comenzó
una campaña crítica contra el PCd'I en octubre de 1921 (y que iba a llevar a
una eventual ruptura con las bases del PCd'I entre el "ala de
Bordiga" y el "ala Gramsci" aprovada por Moscú).
Otros grupos izquierdistas se decidieron pronto a no
cooperar con el AdP, con la excepción del Partido Republicano del Lazio, Veneto
y la Federación de Juventud y ciertos grupos sindicalistas revolucionarios de
las zonas de Parma y Bari. Estos otros partidos prefirieron organizar la
autodefensa siguiendo lineas partidistas y distanciándose frecuentemente tanto
de las fuerzas "reaccionarias" de los fascistas, nacionalistas and
liberal-conservadores como de las fuerzas "anti-nacionales" de los
anarquistas, comunistas y socialistas.
El único componente proletario que apoyó abiertamente
al AdP fue el movimiento libertario, ya en sí mismo una colección multicolor de
ideas. En cualquier evento, durante 1921 y 1922, tanto la Unione Sindacale
Italiana como la Unione Anarchica Italiana fueron partidarias de la estructura paramilitar
de autodefensa obrera. El diario anarquista Umanità Nova de hecho fue el último
periódico proletario en dar voz a
la causa del AdP tras la adhesión del periódico de Gramsci
L'Ordine Nuovo a la línea del partido.
“Notas sobre la Resistencia anarquista en Italia 1943-1945”
Giorgio Sacchetti
Italia se rindió formalmente a los Aliados el 8 de
septiembre de 1943, aunque zonas del centro y del norte del país permanecieron
en manos de los alemanes y de la fascista República de Saló. Los anarquistas se
lanzaron de inmediato a la lucha armada, constituyendo allí donde pudieron
(Carrara, Pistoia, Génova, Milán) formaciones propias o, como ocurrió en la
mayoría de los casos, uniéndose a otras formaciones, como las brigadas
"Matteotti" (socialistas), las "Garibaldi" (comunistas) o
las unidades "Giustizia e Libertà", del Partido de Acción.
20 años de dictadura fascista que, quizás
intencionadamente (N. del T.: como en el caso español), etiquetó a todo tipo de
oposición como "comunista", el exilio, la prisión y el trato no menos
duro reservado a los anarquistas por el gobierno postfascista de Badoglio
dificultaron enormemente la labor de reorganización de las filas anarquistas.
Fue en este especial contexto, marcado por la confusión y la desorientación,
que tuvo lugar una nada despreciable hemorragia de libertarios hacia el Partido
de Acción, el Partido Socialista y en ocasiones el Partido Comunista. Aunque la
participación anarquista en la lucha partisana fue importante, sobre todo por
su aportación humana, pudo ejercer poca influencia. Esto se debió a la completa
hegemonía de las ideas socialdemócratas presentes en un amplio arco de grupos,
desde los liberales hasta los comunistas.
Aquí se recogen algunos datos de anarquistas en la
lucha partisana en diferentes zonas de Italia desde el momento de la rendición
a los Aliados:
Roma
En Roma, los anarquistas se encuadraron en varias
formaciones de la Resistencia, especialmente en una comandada por el
republicano Vincenzo Baldazzi, que era bien conocido por los compañeros como
viejo amigo de Errico Malatesta. Muchos dejaron sus vidas en la Resistencia,
como Aldo Eluisi, que pereció en las Fosas Ardeatinas; Rizieri Fantini, muerto
de un disparo en Fonte Bravetta; Alberto Di Giacomo (alias ‘Moro’) y Giovanni
Callintella, ambos deportados a Alemania, de donde nunca volvieron; o Dore, de
origen sardo, que cayó en una misión tras las líneas enemigas.
Las
Marcas
En Las Marcas los anarquistas se integraron en
diversas formaciones partisanas de Ancona, Fermo, Sassoferrato y Macera (donde
Alfonso Pettinari, comisario político en una brigada ‘Garibaldi’, encontró la
muerte).
Piombino
Piombino, una ciudad industrial con una gran
tradición libertaria, sobre todo de sindicalismo revolucionario, protagonizó un
levantamiento contra los nazis el 10 de septiembre de 1943: entre los
anarquistas que tomaron parte en él se encontraba Adriano Vanni, que operó como
partisano en Maremma y que fue llamado a integrar el CLN (Comité de Liberación
Nacional) local cuando se formó.
Livorno
En Livorno, los anarquistas estuvieron entre los
primeros en apoderarse de las armas de los barracones y de la Academia Naval de
Antignano, armas que serían usadas más tarde contra los ocupantes alemanes y
los fascistas. Organizados en los GAP (Grupos Patrióticos de Acción), tomaron
parte en las operaciones guerrilleras en la zona de Pisa y Livorno y estuvieron
representados en el CLN local. Virgilio Antonelli destacó en las labores de
liberar rehenes y prisioneros de manos del enemigo.
Carrara
En la zona de Carrara, la contribución libertaria a
la Resistencia fue crucial. Las formaciones partisanas anarquistas activas en
la zona fueron la
"Gino Lucetti" (60-80 integrantes), "Lucetti
bis" (58 integrantes), "Michelle Schirru" (454 guerrilleros),
"Garibaldi Lunense" y "Elio" (30 personas). Tras el 8 de
septiembre, los anarquistas (entre ellos, Romualdo Del Papa, Galeotti y
Pelliccia) lideraron el ataque sobre los barracones fascistas, apoderándose del
armamento e instando a las tropas alpinas a desertar y unirse a los partisanos.
En las cavas de Lorano, Ugo Mazzuchelli usó este
armamento para crear el batallón "Gino Lucetti", del que fue
comandante: integrado en la
Brigada Apuana, una de sus tareas fue proveerse de fondos y
ayudar a la población a obtener aprovisionamientos mediante expropiaciones a
capitalistas. Habiendo pasado por la amarga experiencia de la Guerra y
Revolución española, en la cual los comunistas se volvieron contra los
anarquistas y los trabajadores, los compañeros con más experiencia
desconfiaron, con razón, de ellos. Aunque hay que remarcar que hubo anarquistas
en la práctica totalidad de formaciones, no sólo en las netamente libertarias.
En noviembre de 1944, tras una operación en la que
perdieron la vida seis compañeros, el batallón Lucetti se trasladó a la
provincia de Lucca, en cuya liberación participarían. Ugo Mazzuchelli, junto a
sus hijos Carlo y Álvaro, cruzó la línea del frente de nuevo para ayudar a la "Michelle Schirru"
a liberar Carrara, antes de que aparecieran los Aliados. Entre los muchos
compañeros que destacaron en la lucha, pueden citarse al comandante Elio
Wochiacevich, a Venturini Perissino y a Renato Machiarini.
Los anarquistas intentaron dar a la lucha armada por
la liberación un carácter de lucha social e impulsaron las cooperativas
"del Partisano" (de consumo), Lucetti (para la reconstrucción) y
colectividades diversas (agrícolas, extractivas, de obras públicas...).
Lucca
y Garfagnano
En Lucca y en Garfagnano, en cuyas montañas también
actuaron anarquistas de Pistoia y de Livorno (entre otros, Peruzzi y
Paoleschi), los libertarios se integraron en la unidad autónoma comandada por
Pippo (Manrico Dicheschi). El CLN de la provincia había sido creado por el
anarquista Federico Peccianti, en cuya casa tenían lugar las reuniones. La
unidad de Pippo hizo prisioneros a unos 8.000 nazis y provocó 300 bajas. Los
compañeros Libero Mariotti, de Pietrasanta, y Nello Malacarne, de Livorno,
pasaron una buena temporada en la cárcel de San Jorge, en Lucca. Entre los
anarquistas más famosos caídos en la lucha estaban Luigi Velani, teniente en la
formación de Pippo, Ferrucio Arrighi y Vitorio Giovanetti, encargados de
establecer los contactos entre las fuerzas antifascistas de la ciudad.
Pistoia
Pistoia fue el escenario de operaciones de la unidad
anarquista "Silvano Fedi"; compuesta por 53 partisanos, que se
distinguieron especialmente por la ayuda prestada a los perseguidos.
Inicialmente, se había formado un grupo de resistencia gracias a la labor de
Egisto y Minos Gori, Tito y Mario Eschini, Tiziano Palandri, Silvano Fedi y
otros. Este grupo llevó a cabo una serie de misiones, entre ellas abastecerse
de armas y liberar prisioneros. La figura de su joven comandante, Silvano Fedi,
es de leyenda: murió en una emboscada (las circunstancias no están muy claras)
tendida por italianos, como ha declarado Enzo Capecchi, que estuvo presente
(sería después el comandante hasta ser herido). La unidad, comandada finalmente
por Artese Benesperi, fue la primera en entrar en Pistoia tras la liberación.
Florencia
En Florencia, donde Latini, Boccone y Puzzoli habían
publicado con anterioridad un "Umanita Nova" clandestino, la primera
formación armada fue creada en Monte Morello bajo el mando del anarquista
Lanciotto Ballerini, que murió en combate. Los historiadores oficiales han
retratado correctamente a Lanciotto Ballerini como un héroe, pero se les ha
"olvidado" mencionar que era anarquista. Otros compañeros caídos en
la lucha fueron Gino Manetti y Oreste Ristori. Este último, de Empoli, había
tenido previamente un papel muy destacado en el movimiento obrero de carácter
libertario en Brasil y en Argentina y había luchado contra el fascismo en
España.
Arezzo
En la provincia de Arezzo los anarquistas estuvieron
especialmente activos en Valdarno, continuando con la rica tradición
antifascista y de lucha social de la zona. El minero Osvaldo Bianchi formó parte del
CLN en San Giovanni Valdarno como representante de los grupos anarquistas.
También se distinguieron Renato Sarri, de Figline; Italo Grofoni, encargado de
llevar explosivos al CLN de Toscana establecido en Florencia; o Giuseppe Livi,
de Angliari, que estuvo activo en las "bandas de la periferia" que
operaron en Vultiberina y que desenmascaró justo a tiempo a un espía alemán que
se había infiltrado en los partisanos de Florencia.
Rávena
En Rávena, muchos anarquistas lucharon en la 28º
Brigada Garibaldi. Entre los más conocidos estuvieron Primo Bertolazi (miembro
del CLN provincial), Guglielmo Bartolini, Pasquale Orselli (que comandaba la
primera patrulla partisana que entró en Rávena), Giovanni Melandri (encargado
del abastecimiento de armas y alimentos y asesinado, junto a sus hijas, en una
represalia nazi).
Bolonia
y Módena
En la provincia de Bolonia y Módena los siguientes
compañeros estuvieron especialmente activos: Primo Bassi de Ímola, Vindice
Rabitti, Ulisse Merli, Aladino Benetti y Atilio Diolaiti. Diolaiti, fusilado en
1944 en el monasterio cartujo de Bolonia, había tenido un importante papel en
la creación de las primeras unidades partisanas de Ímola y Bolonia, la "Bianconcini"
y las "Fratelli Bandiera" y 7ª GAP, respectivamente. En la liberación
de Módena, Goliardo Fiaschi marchó a la cabeza de la Tercera Brigada
Costrignano de la Divisón Módena, comandada por Araniano. En Reggio
Emilia, Enrico Zambonini, que había estado activo en los Apeninos, en torno a
Villa Minozzo, fue fusilado tras ser capturado junto al grupo de Paquino
Borghi: ante el pelotón de fusilamiento gritó un "¡viva la
Anarquía!".
Piacenza
En Piacenza, destacaron entre otros los anarquistas
Savino Fornasari y Emilio Canzi, ambos muertos en accidentes de circulación.
Emilio Canzi ya había combatido al fascismo en los
años 20 en las filas de los Arditi del Popolo y después en la Guerra Civil
española, luego había sido capturado por los nazis en Francia, deportado a
Alemania e internado en Italia. Tras el 8 de septiembre de 1943, organizó las
primeras bandas partisanas. Capturado por las Brigadas Negras fascistas, fue
canjeado por otros rehenes. Comandó 3 divisiones y 22 brigadas (un total de más
de 10.000 hombres) con el rango de coronel y usó el nombre de guerra de Ezio
Franchi. Las unidades de La Spezia-Sarzana operaron en contacto con las de la vecina Carrara. Dos
formaciones partisanas las comandaban los libertarios Contri y Del Carpio. Los
anarquistas de La
Spezia Renato Olivieri (que había sido preso político durante
23 años) y Renato Perini murieron bajo el fuego nazi mientras cubrían la
retirada de sus compañeros.
Génova
En Génova, los grupos anarquistas de combate
actuaron con los nombres de Brigada Pisacane, formación Malatesta, SAP-FCL,
SAP-FCL de Sestri Ponente y Comandos de Acción Anarquista de Arenzano. Los
intentos de crear un "Frente único" con el resto de fuerzas
antifascistas fracasaron debido a la pretensión hegemónica de los comunistas.
Además, los anarquistas estaban representados sólo
en CLN locales y provinciales, lo que les obligaba a emprender la lucha armada
confiando sólo en sus propios apoyos. La Federación
Comunista Libertaria y la USI, que resurgía en los lugares de
trabajo, emprendían iniciativas. El tributo de sangre de los anarquistas
genoveses fue realmente elevado, con docenas caídos por ráfagas de
ametralladora, fusilados o muertos en los campos de concentración. Algunos de
los más activos de entre ellos fueron: Grassini, Adelmo Sardini, Pasticio y
Antonio Pittaluga. Pittaluga murió la víspera de la liberación: antes de ser
asesinado, encontrándose acorralado, arrojó una granada de mano a la patrulla
alemana que le capturó. El partisano anarquista murió en la vecina Savona.
Turín
En la industrializada Turín,
especialmente en las plantas de la FIAT, actuó la unidad anarquista conocida
como Batallón SAP 33 "Pietro Ferrero". Entre los compañeros caídos
estuvieron Dario Cagno, sentenciado a muerte por matar a un fascista, e Ilio Baroni,
originario de Piombino. El anarquista Ruju, partisano en la división "De
Vitis", devolvió la medalla al valor militar recibida por capturar a más
de 500 soldados alemanes.
Asti
y Cuneo
En la zona de Asti y en la de Cuneo, los anarquistas
se integraron en las Brigadas Garibaldi: la más conocida fue la que comandaba
Giacomo Tartaglino, que había estado en Baviera en las filas del movimiento
espartaquista en 1919. En el distrito de Vencelli, entre varios anarquistas que
se habían distinguido por su arrojo, se encontraba Guiseppe Ruzza, que luchó en
la unidad "Valsesia", comandada por Moscatelli. En Milán, los
trabajos de la lucha clandestina fueron iniciados por el compañero Pietro
Bruzzi, que murió tras cinco días de torturas sin haber desvelado nada a los
nazis.
Tras su muerte, los anarquistas crearon las Brigadas
Malatesta y Bruzzi, que agruparon a 1.300 partisanos: operaron dentro de la formación Matteotti
y jugaron un papel de primer orden en la liberación de Milán. Comandadas por
Mario Mantovani durante el levantamiento de 1945, las dos brigadas anarquistas
se destacaron en varias operaciones sobre las posiciones fascistas y por su
apoyo a la población.
Entre los compañeros más jóvenes se encontraba Giuseppe
Pinelli, que sirvió en los GAP.
Pavía
En la provincia de Pavía operó la 2ª Brigada
Malatesta, dirigida por Antonio Pietropaolo, que participó en la liberación de
Milán. En Brescia, los anarquistas se integraron en la formación mixta
Giustizia e Libertà-Garibaldi: entre los más activos de ella estuvieron los
compañeros Borolo Ballarini y Ettore Bonometti.
Véneto
y Friuli-Venecia-Giulia
En Verona, el anarquista Giovanni Domaschi fue el
creador del Comité Nacional de Liberación (CLN). Arrestado por las SS, fue
torturado, le cortaron una oreja por negarse a hablar y finalmente fue
deportado a un campo de contración de Alemania, donde desapareció. En la región
de Venecia-Giulia-Friuli muchos anarquistas trabajaron con formaciones
comunistas como la División Garibaldi-Friuli. En Trieste, el contacto
era mantenido por Giovanni Bidolo, que luego moriría en los campos de
concentración alemanes junto a otro anarquista de Trieste, Carlo Benussi.
También estuvo muy activo Turcinovich, el cual, luego se trasladó a Génova
donde luchó con la resistencia local. En la Alta Carnia, donde los
compañeros Petris y Aso (que pereció en el ataque sobre los barracones alemanes
en Sappada) eran muy influyentes, los anarquistas ayudaron a levantar la Zona Libre autónoma.