A continuación 2 artículos que retratan el legado histórico
que dejaron el Maquis en su lucha contra el régimen franquista. El primero es un extracto del trabajo de Ricard Vargas Golarons titulado "El Maquis a Catalunya 1939-1963". El segundo artículo fue producido y publicado por el Grupo Camilo Berneri de la FAI el 13 de mayo de
2008.
"El Maquis a Catalunya 1939-1963"
Por Ricard Vargas Golarons
CAPITULO PRIMERO
SURGIMIENTO DEL MAQUIS
El 1 de abril del 39 acababa la guerra con el triunfo de las fuerzas franquistas. Pocas semanas antes, cerca de medio millón de catalanes habían iniciado el camino del exilio hacia Francia.
El 1 de abril del 39 acababa la guerra con el triunfo de las fuerzas franquistas. Pocas semanas antes, cerca de medio millón de catalanes habían iniciado el camino del exilio hacia Francia.
Sin embargo, muchos catalanes, no se consideraban
derrotados Algunos optaron por seguir luchando en la resistencia francesa
contra la ocupación nazi, y otros se infiltraron, Pirineo abajo, para conectar
con el maquis catalán, rural y urbano, que comienza a actuar a partir del mismo
39.
El maquís catalán surge como defensa y resistencia
desesperada, delante la fortísima represión indiscriminada que se abate sobre
Catalunya, en estos primeros años de régimen franquistas.
Son los años de la Segunda Guerra Mundial, en la cual
serán creadas varias Cadenas de Evasión en el Pirineo, para ayudar a los
aliados y contar con su ayuda armada contra Franco, una vez terminada la
guerra.
El vocablo francés Maquis -equivalente a guerrillero
o resistencia armada-proviene de la palabra corsa "Macchia" y
significa "Terreno de matorrales o vegetación espesa" y se introdujo
en Catalunya, a raíz de las penetraciones guerrilleras provenientes de Francia.
Ideológicamente, el maquis antifranquista en
Catalunya fue predominantemente libertario y esporádicamente comunista con un
intento fallido del nacionalismo radical.
Grupos de jóvenes libertarios serán el motor de la
resistencia ,desde el mismo 39 con diversos tipos de acciones, como era la
falsificación de documentos, organización de atentados ,salvamentos de presos y
reconstrucción de la CNT.
El 23 de marzo del 39 era desarticulado en Barcelona,
un grupo de las JJ.LL. compuesto por 23 jóvenes entre 16 y 18 años, procedentes
de barriadas obreras de Barcelona. Se les encuentra máquina de escribir,
propaganda y diverso material bélico.
El 30 de abril ,moría en un atentado en el Bar
"España" de la Gran Vía/Plaza España, el comisario en jefe del
districto de Hospitalet. La acción fue obra del grupo de Joaquín Pallarés que
actuaba en Hospitalet y Sants(barrio barcelonés) zona donde la represión y las
humillaciones llegaban al punto que los sacerdotes, escoltados por la guardia
civil y los falangistas, obligaban a confesar a los viandantes en plena calle.
Otro grupo dirigido por Salvador Gómez Talón salvó
las vidas de numerosos presos del campo de concentración de Horta, situado
entonces en "Las Llars Mundet".(Residencia actual de ancianos)Se
presentaron vestidos de guardias civiles con una lista falsificada, para
llevarse los presos a la Modelo. Pero un día, se descubrió la jugada y se
produjo un enfrentamiento armado entre los falsos guardias civiles y los
militares.
A partir de entonces, los resistentes libertarios
cambiaron de método: El campo de concentración de Horta, donde había 4000
prisioneros, era muy frecuentado por una treintena de falangistas que se
llevaban en cada viaje unos 20 presos, para fusilarlos sin ningún juicio. En
"Can Tunez "o en el "Campo de la Bota"(Donde hoy está la
Villa Olímpica y de triste recuerdo para los anarcosindicalistas), atacaron al
conductor y la escolta y consiguieron liberar a los condenados a muerte.
Muchos de ellos, serían detenidos en septiembre del
39, algunos de los cuales serían ejecutados cinco días más tarde. El 29 de
marzo del 43 eran ejecutados 9 jóvenes reorganizadores de las JJ.LL. de
Catalunya, acusados de atracos ,enfrentamientos con la guardia civil y acciones
de sabotaje.
A partir del 39 en el Alto Empordán, se empezaron a
reunir diversos grupos de maquis de montaña. Después de una primera etapa de
aprovisionamiento de víveres, pasaron a actuar en los pueblos de la zona donde
se encontraban.
A mediados del 44 se unirán a pequeños grupos de
guerrilleros llegados de Francia, y comenzaron a frecuentar sus ataques y a profundizar las
infiltraciones esporádicas. Así, los guerrilleros consiguieron llegar hasta las
puertas de Sant Joan de les Abadesses.
A finales del 44, sucedió un hecho muy espectacular
de la época, diversos grupos que sumaban unos 60 hombres, atacaron cerca de
Campdevanol una unidad del ejército, responsable entonces de la represión del
Maquis. La operación fue favorable a los guerrilleros, ya que a pesar de que el
ejército recibió refuerzos, se apoderaron de un camión y se rindieron muchos
soldados, algunos de los cuales se pasaron al lado de los guerrilleros.
También en esta época, un importante grupo del
Maquis, irrumpió cerca de Banyoles, y se desvió después hacia Besalú y
consiguió despistar a sus perseguidores.
También se crearon núcleos guerrilleros en diferentes
cordilleras del país como en la Sierra del Cadí, del Montsec, y del Montsant.
en las Tierras de Poniente, donde la partida del "Drole" actúa en las
comarcas del Segrià, La Noguera y Tamarite de Litera.(Lérida, Huesca). Entre
otros grupos guerrilleros provenientes del Maestrazgo, debe destacarse el de
Teresa Pla Messeguer, conocida por "La Pastora",enigmático personaje
que dirigió numerosas acciones por las zonas del Montsià ,el Bajo Ebro y la
Terra Alta(Tarragona).
La táctica empleada por estos grupos rurales eran de
continua movilidad, la acción por sorpresa y el replegamiento estratégico.
Estas eran las zonas de refugio del Maquis.
Estas son las poblaciones donde se registraron
acciones del Maquis.
Juntamente con esta incipiente guerrilla, tanto
urbana como rural, que comienza a actuar en los años de la 2ª Guerra Mundial se crearon un
gran número de charchas de evasión. El objetivo consistía en salvar el máximo
posible de gente, amenazada por los nazis, en la otra parte de la frontera y
hacerla llegar de Catalunya a Gibraltar o Lisboa y de allí a Londres.
Una de las charchas de evasión pirenaicas más activa
fue la"Pat O’Leary" o "Cadena Ponzan", la cual pasó cerca
de 3000 personas del 40 al 43, franceses que querían llegar a Inglaterra para
luchar con De Gaulle ,o a Alger para integrarse a las tropas de Leclerq ,judíos
que huían del exterminio nazi, soldados y oficiales aliados de toda Europa y
también destacadas personalidades de los países ocupados por Alemania.
De entre los evadidos se encuentran el general inglés G.Roupell,
el comandante yugoslavo Lyulomir Illitx, el comandante norteamericano Edward
Reeves, el comandante polaco M. Borajklewicz, el cabo de gendarmería belga J.
M. J Quoilin y el comandante Thisse J.Ohe, alta personalidad en el ejército
belga actual entre muchos otros.
L a Cadena "Pat O’Leary" fue organizada el
40 por el Cenetista Francisco Ponzan, que estableció su cuartel general en la
Calle Lymayrac 42 de Toulouse del Llenguadoc.
Francisco Ponzan Vidal, que durante la guerra había
sido miembro del consejo de Aragón era el máximo responsable de una extendida
charcha de colaboradores, entre los que destacaban Manuel Huet y Juan Zafón, responsable
este último de la antena marítima de la charcha de evasión. Contaban con una
docena de colaboradores de militancia libertaria o bien procedentes de la
resistencia francesa.
No hace falta decir, que disponían de una buena
infraestructura, abundantes refugios ,casas donde esconder temporalmente a los
evadidos a uno y otros lado de los Pirineos.
La Cadena disponía de pasos terrestres y marítimos.
El paso terrestre salía de Toulouse, del Hotel París,
verdadero cuartel de la resistencia toulosiana y de allí se dividía en
diferentes pasos: uno, bajaba hasta Foix ,pera continuar recto hasta entrar en
Andorra, pasando la frontera por Sant Joan de Lória -La Seu d’Urgell,pasando
por Arcadell y Alàs y continuando después hasta Lérida o Barcelona.
El otro camino era Toulouse, Carcassona, Narbone
,Perpinyà y de allí pasaban la frontera por tres puntos diferentes De Caseja a
Urgt ,al sur de Bourg Madame a la Cerdanya.
Otro punto: partía del pueblo de Palau del Vidre en
el Rosellón, a la sierra de Castellar, entrando por los pueblos de Espolla y
Rebós.
Y el tercero, el paso de Vallespir, saliendo de
Costoja, atravesaban la frontera, dejando Albanyà de lado entrándose hacia Maià
de Moncal y Besalú. Todos estos pasos pirenáicos, evidentemente iban a parar a
Barcelona.
Los pasos marítimos tenían como puntos de partida:
Canet Plage y Port Vendres para llegar al puerto de la Escala, como base
principal, la Bahía de Rosas y la playa entre Llança y Colera.
A finales de 1942 y durante el 43, Huet y Zafón
también organizaron salidas desde los puertos de Marsella y Niza, con llegada a
Barcelona. En total fueron unos ochocientos, los evadidos extranjeros que
llegaron a la costa catalana.
Los jefes militares y políticos eran llevados a las
embajadas de Madrid y los aviadores eran entregados al consulado en Barcelona
Francisco Ponzán Vidal, fue detenido en octubre del
42 por la policía colaboracionista de Vichy e internado en el campo de Vernet
d’Arieje, de donde se escapó al cabo de tres días con la ayuda de la
resistencia.
Desde el Hotel París de Toulouse, vuelve a dirigir las evasiones.
Ponzán no era un hombre violento y rehuía siempre de
ir armado. Así, su detención en abril del 43 no ofreció ninguna resistencia.
Después de ser juzgado, cinco meses después fue
encerrado en la prisión de Saint Michel de Toulouse, hasta que el 5 de junio se hizo cargo la
Gestapo.
Y el 17 de agosto del 44 a la víspera de la
liberación de la ciudad por la resistencia, fue conducido juntamente con 50
detenidos más al pueblo de Buzet sur Tarn, a unos 30 km de Toulouse, donde
fueron todos fusilados, en un bosque cercano y después incendiados.
Franisco Ponzan Vidal, recibiría, en reconocimiento
de los servicios prestados a los aliados y a título póstumo, las máximas
condecoraciones: De Inglaterra, La Insignia Hoja de Laurel de su Majestad; de
los Estados Unidos la medalla de la Libertad; y de Francia la Medalla de la
Resistencia y la Cruz de Guerra con distinción.
Después de todo, fueron muchas las charchas de
evasión que se fueron montando, en estos años de la segunda guerra Mundial, Se
calcula que cerca de 30.000 hombres se evadieron atravesando Catalunya.
De estas charchas destacó, sobretodo la organizada
por el grupo de Francisco Viadiu en Andorra, que consiguió pasar a unos 2500
combatientes; La charcha de evasión de Joan Cornudella, que ayudó a escapar por
los Pirineos a unos 600 aviadores a través de Puigcerdá , Sant Llorenç de
Cerdans y el Coll
de Banyuls.
También cabe destacar una charcha organizada por el
POUM, partiendo de Lyon y Marsella, entre muchas otras.
En 1945, se produciría un renacimiento de las fuerzas
políticas catalanas en la clandestinidad, coincidiendo con varias huelgas, y
con un bloqueo económico de los países democráticos, que hará confiar a muchos
en una posible intervención aliada, que ponga fin al régimen franquista.
Será también en este período, del 45 al 50 cuando se
producirá un gran crecimiento e intensificación del Maquis tanto rural como
urbano.
Por último del 50 al 63, el estado español se
afianzará internacionalmente cuando serán anuladas (en 1950)las resoluciones de
la ONU contra el gobierno de Franco.
Afianzado y seguro, el régimen realizará una fuerte
represión del maquis urbano -iniciada ya a finales de los 40, un 80 % de los
efectivos guerrilleros de Catalunya serán aniquilados. Nada más restarán tres
grupos, el de Facerias, Quico Sabaté y Ramón Vila Capdevila.
CAPITULO SEGUNDO
LA INVASIÓN DEL VALLE DE ARAN
Liberada la mayor parte de Francia, en el verano del
44,la progresiva retirada de los alemanes produjo un clima de entusiasmo y
euforia entre los guerrilleros y los refugiados, que creían que los días del
franquismo estaban contados.
Fue entonces cuando la UNE (Unión Nacional Española)
plataforma política del PCE, comienza a preparar la operación "Reconquista de
España" que consistía en introducir desde el Pirineo vasco hasta el
Pirineo Catalán ocho o diez mil guerrilleros. La zona de penetración más
importante tenía que ser el Valle De Arán.
De junio a septiembre el Estado mayor de la agrupación
Guerrillera, envía varios grupos al otro lado del Pirineo con el fin de
explorar el terreno y averiguar si el pueblo estaba dispuesto a secundar el alzamiento
armado contra el régimen franquista.
Los informes enviados por las avanzadillas
guerrilleras no daban ninguna posibilidad de éxito a la ocupación de la Valle
de Aran. Igualmente, nada alteró los planes de invasión ordenadas por los
dirigentes comunistas.
Influyeron en la decisión, tal vez, las palabras pronunciadas
por Eisenhower, ninguna de las fuerzas aliadas en Europa, a los españoles que
combatían a sus órdenes:"A pesar que el asalto final a vuestro país no se
ha realizado, la hora de vuestra libertad está cerca".o quizá, más bien
por las ordenes o consejos de Stalin enviados a mitad del año 1944 a Lister.
Lo cierto es que antes de empezar la invasión era ya
un hecho que no podría resultar: mantener liberada una zona del estado español,
proclamando la República, con un gobierno provisional presidido por Negrín, y
provocar, así una intervención aliada, era más que difícil de conseguir.
Así se forma la 204 División, compuesta por 11
Brigadas, más una de reserva, formada cada una por 300 o 400 hombres. Antes se
había hecho una amplia propaganda en las filas de todas las organizaciones
antifranquistas en Francia. Inducidos por el entusiasmo del momento y por las
ganas de contribuir a derrocar al franquismo se alistaron a parte de los
comunistas, varios centenares de anarco-sindicalistas y también socialistas.
Pocos días antes de la invasión del Valle de Aran,
una penetración por los valles de Navarra integrada por 2500 guerrilleros había
acabado en un desastre total.
A pesar de estos antecedentes al amanecer del 19 de
octubre de 1944, comandados por Vicente López Tovar, entrarán en el Valle de
Aran de 1500 a
2500 guerrilleros, mientras otras Brigadas lo hacen simultáneamente por el
Pallars y la Cerdanya.
La mayoría de guerrilleros iban bien armados, metralletas,
Thomson o Stern, carabinas americanas Rock Oll, y fusiles ametralladoras y
pistolas. Muchos llevaban bombas de mano, explosivos americanos y alemanes y
"plástico", entonces desconocido por el ejército español. Los
víveres, se los habían de procurar ellos mismos.
El mismo día 19 ocuparán casi toda la totalidad del
Bajo Aran.
Igualmente, el maquis izó la bandera tricolor
Republicana, en todos los ayuntamientos, que ocupó, organizando mítines
antifranquistas en las plazas del pueblo.
También el día 19, una vez liberados los pueblos que
conducen a la frontera con Francia, por (Pont de Rei) Puente de Rey, entró una
columna de camiones con más guerrilleros, cañones y material bélico pesado.
Las fuerzas ocupantes llevaban propaganda de la Unión
Nacional y diferentes octavillas para ser distribuidas entre la población
civil, y también dirigidas a los soldados, a los cuales nada más podían
dispararles en caso de defensa propia, como mesura adoptada para decantar a los
soldados a la causa
guerrillera.
La actitud de los araneses salvo contadas excepciones
se caracterizó por la pasividad e inhibición generalizada, tanto de cara a los
maquis como a los franquistas, a población no se encontraba en condiciones ni
morales ni materiales de secundar ningún alzamiento.
¿Pero, por dónde entró el maquis y qué resistencia
encontró en el Valle de Artan?.
La Brigada 11, penetró por Port de Benasc, girando
después hacia el Hospital de Viella, en la parte sur del Túnel, con el fin de
cerrar el paso al ejército que quisiera entrar en la Valle de Aran por aquel
lugar.
La Brigada 551, penetró por Port d’Era Roqueta y se
dividió en tres columnas; la primera se dirigió hacía Bausén, pasando antes por
Canejan donde al verlos venir la Guardia Civil huyó hacia el Bosque.
La segunda Columna se dirigió hacia Lés, ocupando
Purcingles sin luchar, el batallón Honorato, hizo prisioneros a 10 guardias
civiles.
La tercera Columna pasó por los pasos de Estiuera y
Cuma y se dirigió hacía Bossot, donde la Guardia civil ofreció resistencia,
desde su casa cuartel. El fuego entre los dos bandos duró bastante tiempo; los
guardias civiles no se rindieron hasta que algunos guerrilleros lanzaron bombas
de mano por las ventanas.
En Bossost, la población más importante del Bajo
Aran, y lugar de origen del "General César" Juan Blazquez, segundo
jefe de la agrupación de guerrilleros, murieron dos policías armados, y fueron
incendiadas por los maquis muchas fichas de la mencionada Casa Cuartel.
La 410 Brigada, se introdujo por el Valle, a través
del Port de Tavascan en dirección a Les Bordes. Allí, la resistencia al maquis
fue muy dura ya que se encontraba la segunda compañía del Batallón
"Albuera"(Franquistas).
En la madrugada empezó el tiroteo: la mayoría de la
compañía, sorprendida en las casas donde vivían, se rindió al maquis, pero, una
parte de la tropa, más la Guardia civil, siguió luchando. El combate se produjo
en la pequeña plaza mayor del pueblo: Los guerrilleros se instalaron en el bar
estanco zapatería, desde donde disparaban contra dos viviendas situadas delante
mismo desde donde resistían un teniente, un sargento varios soldados y guardias
civiles.
A la que un guerrillero intentó lanzar una bomba
incendiaria, el sargento disparó, hiriéndolo, y la bomba que tenía en la mano
cayó en el balcón de madera provocando un incendio y destrucción total de la
casa. El teniente, con sus hombres logró escapar. Así y todo, fueron hechos
prisioneros 80 soldados. En la encarnizada lucha, murieron 6 guerrilleros y 9
hombres más entre soldados y guardias civiles.
Mientras que el Bajo Aran se conquistaba de una
manera vertiginosa, en el Alto Aran, ya no fue tan fácil. Así la 9ª Brigada,
entró por Port d’Orla en dirección a Salardú.
Ocuparon Bagergue, instalando fusiles ametralladores
en el campanario, donde estaba el estado mayor, mientras uno de los batallones,
se instalaba en unos turones, desde donde se dominaba la carretera
Tremp-Viella.
Los demás componentes de la Brigada atacaron Salardú.
Sin poder entrar, a pesar de hacer uso de morteros y bazocas. El combate, que
se prolongó durante horas, causó la destrucción de unas casas de la zona alta.
Con todo, los guerrilleros no pudieron llegar hasta Salardú.
Por la tarde, por el Port de la Bonaigua, llegaron
los primeros refuerzos del ejército, el
5ª Batallón de Cazadores de Montaña "Barcelona" y
también la Legión y Regulares. El maquis tuvo que retroceder.
Si el asalto guerrillero al Alto Aran hubiera
triunfado, habría permitido cortar la retirada al general Moscardó y al resto
de las tropas del Valle, impidiendo la llegada de refuerzos.
También se luchó en Arrás, donde se registraron
combates entre el maquis y la Guardia Civil. En Geusac hubo enfrentamientos el
27 de octubre con 22 bajas por parte del ejército.
El Port de la Bonaigua no pudo ser ocupado por el
maquis. La capital Viella, fue hostilizada por las fuerzas guerrilleras des de
Vilac (Medio Aran) y Pla de Vias. Pero, López Tovar no dio la orden de atacar
Viella porque la ciudad había estado fortificada por la guardia civil,
Batallones y Compañías del ejército. El General Moscardó había instalado su plana mayor
en el Hotel Internacional.
Otra razón para no atacar (Viella) según López Tovar,
fue porqué temía un ataque por la retaguardia que les habría cortado la salida
hacia Francia, sin posibilidades de escapatoria.
Con este peligro y la presión constante de divisiones
y batallones del ejército, compañías de policía armada y guardia civil, que
sumaban más de 30.000 hombres López Tovar ordenó la retirada, antes de que no
fuera demasiado tarde, en contra de las órdenes recibidas del Estado Mayor de
Unión Nacional con el fin de salvar las vidas de sus hombres. Así los
guerrilleros entraron en Francia por Pont de Rei, con 300 soldados y 30
guardias civiles hechos prisioneros, que fueron llevados hasta el Cuartel General
de la agrupación Guerrillera en Toulouse, para ser dejados en libertad poco
tiempo después.
El Valle de Aran -menos Viella, El Port de la
Bonaigua, Salardú y norte del Túnel de Viella, estuvo 11 días bajo control
guerrillero, hasta el 30 de octubre en que las tropas del ejército llegaron a
la frontera por el Pont de Rei.
Las consecuencias de este fracaso fueron muchas:
Peleas internas y purgas dentro del PCE; pérdida del prestigio ganado por los
guerrilleros españoles en Francia; ascenso de Santiago Carrillo y muerte
política de Jesús Monzón, impulsor de la "Reconquista de España"
reforzamiento indirecto del régimen franquista, y finalmente, un cambio de
estrategia en renunciar a más invasiones y luchas frontales, para pasar a
introducir grupos de guerrilleros hacia el interior, que tomaran contacto con
las partidas de los maquis en el interior.
Como dato positivo cabe remarcar las escasas bajas
que tuvo el maquis, debido a la ordenada retirada, mandada por López Tovar.
Entre los guerrilleros hubo 21 muertos y unos pocos
heridos. En cambio, por el bando franquista hubo 34 muertos algunos heridos y
330 prisioneros.
En cambio las otras Brigadas que pasaron la frontera
unos días antes o el mismo día de la invasión para introducirse más hacia abajo
y proteger así la invasión del Valle de Aran, fracasaron rotundamente. Los que
pudieron salvarse decidieron volverse hacia casa, porqué vieron claramente, que
los habían enviado al matadero.
CAPITULO TERCERO
ASCENSIÓN Y CAÍDA DEL MAQUIS URBANO
Hendaya 23-10-1940.
Domènec Ibars, Luchador en el maquis francés y jefe
de 35 guerrilleros catalanes, se encontraba casualmente en Hendaya. Al
enterarse que aquel mismo día se produciría el histórico encuentro entre el
"Caudillo " y el "Führer" decidió efectuar la primera de
una serie de acciones siempre silenciadas y mantenidas ocultas por el
franquismo: El intento de acabar con la vida del general Franco.
Domènec Ibars, llamado "El Rosset",había
esperado en vano a su compañero en el atentado; Nunca llegó porqué había estado
detenido. La estación se encontraba militarmente tomada. Decidido a actuar en
solitario, provisto de explosivos suficientes para acabar con la vida de los
dos dictadores, El "Rosset" se dirigió hacia la estación de Hendaya.
A pesar del control militar, Ibars consiguió atravesar un control y acercarse
al anden.
Pero ya no pudo llegar más allá de donde se
encontraba y tuvo que volver hacia atrás, impotente. Desde el punto más próximo
conseguido, era imposible atentar.
El año 1945 con el final de la 2º Guerra Mundial, la esperanza
de una intervención aliada provocó una euforia de movilización obrera que se
tradujo en una reorganización de numerosos partidos y grupos antifranquistas, y
también en la aparición de una potente guerrilla catalana. En Barcelona
frecuentaban los atentados a fábricas e industrias.
Una de las acciones más espectaculares y comentadas
en la época fue la colocación de banderas catalanas en lugares públicos y
visibles para todo el mundo. La primera fue izada en Solsona, el 43, en el
Santo Cristo del Seminario. En la Diada Nacional de Cataluña del 45 apareció
una bandera catalana de grandes dimensiones arriba del trasbordador aéreo
delante del gobierno Militar (Barcelona). Fue desliada por medio de dos polichas
dejadas ir por encima del cable. Al año siguiente por Sant Jordi (23 abril)una
inmensa bandera catalana se desplegó en las torres de la Sagrada Familia. Quién estaba
detrás de estos actos de afirmación nacionalista?.
El Front Nacional de Catalunya, la fuerza
nacionalista radical y más activa, que tuvo 114 militantes, detenidos en
1943,se reorganiza y crea una sección militar en el 44, dirigida por el
ex-coronel de artillería, Jaume Martínez Vendrell.
A principios del 46, con el armamento introducido por
el Coll de Núria
se crea un campo de entrenamiento militar situado cerca de Sant Just Desvern en
zona montañosa. El intento de formar diversos grupos armados por parte del
Front Nacional de Catalunya fue abortado definitivamente al ser detenido en
bloque toda la dirección de la sección militar, en junio del 46.
El año 1947,cuando el general Franco llega a
Barcelona con el fin de convencer a las "democracias" que el pueblo
español apoyaba al "Caudillo", el maquis urbano intenta tres
atentados.
Procedente de Ciudad de Mallorca estaba a punto de
llegar Franco al puerto de Barcelona, escoltado por 11 unidades de la Armada,
el día 17 de mayo.
Decenas de miles de barceloneses acudieron a verle
desembarcar en la Puerta de la Paz. (Colón) Días antes -como era habitual- la
policía había efectuado operaciones de control sobre militantes obreros o
simples sospechosos que habían estado detenidos y encerrados en la Modelo, como
medida de seguridad, Domènec Ibars, el hombre de Hendaya, había podido eludir,
una vez más, las charchas de vigilancia. El "Roset" había atravesado
la frontera para unirse a un grupo de guerrilleros llamado "Els
anònims" (Los anónimos) con el fin de atentar contra el dictador tan
pronto pusiera los pies en tierra.
El grupo iba proveído de dos bombas de trilita y
plástico, de kilo y medio cada una y con documentación falsa de inspectores de
policía. Los artefactos iban disimulados dentro de carteras de cuero y todos
llevaban pistolas.
En medio de la multitud se situaron al pie del
monumento a Colon: dos de ellos se ubicaron al lado de los leones de la base.
Delante de ellos y en primera fila se habían colocado los otros compañeros. Son
las diez y cuarto de la mañana: suenan las sirenas de todos los barcos anclados
en el puerto. Las máximas autoridades civiles, militares y eclesiásticas salen
a la explanada para recibir al "Caudillo".
Los artefactos fulminantes aún no han estado
activados.
Unos minutos antes que se forme la parada de las
autoridades, los hombres de primera fila se desconciertan, delante suyo, pasan
dos columnas de niños, enarbolando banderas españolas. Los guerrilleros se
miran. Los que están cerca de los leones observan la maniobra y consultan a
Ibars con la mirada. Ondean pancartas y banderas. El "Generalísimo"
desembarca del crucero "Miguel de Cervantes". La llegada de los
niños, se colocan al lado mismo de donde había de pasar Franco, impidió la
realización del atentado. Si se hubiera llevado a cabo habría comportado una
gran matanza infantil. Y los guerrilleros lo sabían (por ello se abstuvieron).
Durante el mismo viaje de Franco a Cataluña se
prepara otro atentado: el Plan Mil 1.
Organizado por la Comisión de Defensa del Movimiento
Libertario en Francia, donde había apuntados 50 hombres, reforzados por
resistentes de Barcelona.
El grupo de guerrilleros salió de las bases de
Tartàs, en Francia.
Tenían que llegar hasta la carretera de Berga a
Guardiola por donde había de pasar la comitiva de Franco, después de visitar
las minas de Sallent.
Ocupados los lugares más estratégicos, se trataba de
minar la carretera con cargas explosivas. Las deflagraciones irían acompañadas
por disparos de mortero, mientras que las ametralladoras harían fuego cruzado.
El éxito de la operación parecía seguro, ya que los
expedicionarios podrían retirarse rápidamente y llegar inmunes a las bases de
Tartàs.
Este plan tan meticulosamente preparado fracasó
debido a que una parte de la expedición se retrasó por la montaña y en conectar
de nuevo con el grueso de la columna, en plena noche, Ibars abrió fuego al
confundirlos(a los compañeros) con una patrulla de la Guardia Civil.
Los disparos alertaron las patrullas de la
Benemérita(Guardia Civil) e inmediatamente intensificaron la vigilancia.
Con estas condiciones era ya inútil de llevar a término el atentado por
sorpresa. La expedición, guiada por "Caracremada", retornó a Francia,
a pesar del incremento de la vigilancia por parte de la Guardia Civil y el
ejército.
Aún en el transcurso de la visita de Franco a
Cataluña habría otro intento de atentado. La acción la llevaría a término Pere
Adrover Font "El Yayo" combatiente del maquis francés que fue
detenido por la Gestapo y llevado al Campo de exterminio de Mauthausen, de
donde consiguió escapar.
Pedro Adrover volvió clandestinamente a Barcelona,
donde fue uno de los militantes más activos y buscados por la policía, hasta su
fusilamiento el año 1952.
Su atentado fallido consistía en intentar entrar en
la Catedral cuando estaba el "Caudillo" con una bomba escondida en
una caja de zapatos. Pero le fue imposible de romper la barrera y entrar dentro
del templo, literalmente tomado por los inspectores de la Brigada Social y la
guardia personal de Franco.
Mientras tanto, la esperada intervención aliada no
llegaba. En contrapartida el régimen franquista se consolidaba
internacionalmente, al tiempo que se incrementaba la represión, tanto en el
país como en el sur
de Francia.
Donde se infiltraban numerosos elementos de la
Brigada Político-Social.
Los resistentes antifranquistas sabían que si no era
posible esperar ninguna ayuda de los aliados, hacía falta provocar de alguna
manera, la caída del régimen.
Los numerosos grupos de acción que surgían, se
dedicaron a acciones de sabotaje, con la voladura de líneas de alta tensión,
atentados a locales Falangistas y atracos a empresas y entidades bancarias.
Las innumerables pintadas que aparecían en los muros
de las fábricas, comportaba que sus autores fuesen armados, ya que se jugaban
la vida.
Tanto la agrupación guerrillera de Catalunya, formada
por comunistas como el Movimiento libertario de resistencia, existieron hasta
finales del 48. Sus acciones consistían en atentados a Casas Cuartel de la
Guardia Civil y a periódicos del Movimiento, así como la distribución de
octavillas y publicaciones antifranquistas impresas desde pequeñas y escondidas
imprentas.
Una de tantas acciones fue la llevada a término por
el comando del Movimiento Libertario, encargado de la muerte del confidente de
la policía -Eliseu Melis- por culpa del cual, habían muerto o sido detenido un
gran número de resistentes.
El año 48 se organizó la sección de Defensa de las
Juventudes Libertarias, estructuradas por barrios, mientras que el partido
comunista abandonaba la lucha armada para pasar su activismo dentro del
Sindicato Único franquista existente (Vertical).
A partir del 48 y sobretodo, del 49 los múltiples
grupos de acción que habían surgido serían aniquilados, muertos en emboscadas o
fusilados. El movimiento obrero y la guerrilla que los apoyaba, había estado
duramente reprimida.
En el año 49, en ocasión de otra visita del general
Franco a Cataluña, se produjeron nuevos intentos de atentado.
Uno de ellos fue el 3 de junio, en la Catedral de Barcelona,
perpetrado por Pere(Pedro) Adrover, Colocando una bomba en el altar de la capilla del Santo Pancracio.
Inesperadamente, el dictador cambia su horario de visita y el artefacto explota
antes de hora.
Una semana más tarde, otro atentado era preparado en
Barcelona. El Generalísimo había de inaugurar la 18 Feria Internacional de
Muestras. Hacía medio año que militantes libertarios crearon una formación de
100 hombres divididos en tres grupos bien sincronizados.
Un primer grupo dispararía sus ametralladoras y
lanzaría granadas contra el Jefe del Estado en el momento de pasar revista a
las tropas, mientras los otros dos grupos disfrazados de policías armados, de
guardias civiles y oficiales del ejército, contendrían a la multitud y
confundirían a las fuerzas leales (del régimen). Mientras el grupo ejecutor con
vestuario de sacerdotes y oficiales del ejército abandonarían el lugar, bajo la
protección de sus compañeros. También habría coches preparados para huir a los
"pisos francos".
Todo estaba a punto, los hombres, los disfraces, las
armas y la estrategia a seguir. Toda la brigada estaba familiarizada con el escenario
del atentado. Esta vez el plan estaba muy bien calculado y no podía fallar.
Pero, la operación tuvo que ser detenida; Un enlace del grupo guerrillero fue
muerto en el Pirineo 20 días antes de la fecha del atentado. La documentación
que el guerrillero muerto llevaba encima era comprometedora para con los planes
del atentado, la operación tuvo que detenerse.
Diezmado, asediado y perseguido a ultranza, la lucha
era del todo desigual y no podía acabar de otra manera. El maquis conseguiría
sobrevivir hasta 1950 y prolongarse durante la siguiente década a través de las
míticas figuras de José Luis
Facerias, Quico Sabater y Ramón Vila Capdevila "Caracremada".
Años más tarde, grupos guerrilleros de Sudamérica
como los Tupamaros, utilizarían en su lucha las mismas tácticas y estrategias
que el maquis catalán.
CAPÍTULO CUARTO
MARCEL·LI MASSANA
A pesar de ser característica y más conocida en
Catalunya la guerrilla urbana , que centra su actuación en Barcelona ciudad y
cercanías, existió una importante actividad guerrillera que actuó en numerosas
comarcas catalanas.
Igualmente, el grupo de maquis rural que tuvo más eco
popular y más calidad fue el de Marcelino Massana, conocido por
"Pancho" entre el maquis. La comarca del Bages y sobretodo el
Berguedà y sus entornos fueron las zonas donde durante seis años la partida de
Massana plantó cara al régimen franquista.
Nacido en Berga el 3 de octubre de 1918, en la calle Reverendo Huch,
nº 8, Marcel.li Massana era el más pequeño de tres hermanos. Perdió a su madre
a los siete días de vida. Entonces le hacía de madre adoptiva, Filomena
Solé,"La dida", por la que siempre sentirá una gran estimación y se
arriesgará a visitarla en muchas ocasiones en Berga, en los años del maquis.
Huérfano a
los 5 años, cuando su padre sufrió un accidente en la mina de
Vila Forniu, estará bajo la tutela, desde los 7 a los 13 años, de su tío Joan
Massana, sacerdote de Solsona, que le hizo ir (al colegio) de "los
Hermanos de las Escuelas Cristianas".
Después se fue a vivir a casa de sus tíos de Mas
Recaus, en Sallent, donde trabajó un año como ayudante de su tío, Miquel Guitó,
(l’Esmolet de Sallent).
Desde los 14 a 16 años, trabaja como aprendiz de mecánico
de Ramón Canudes "El Pixa-Vi" para pasar después a trabajar, también
como mecánico en la empresa textil de "Can Rodergas" en Berga. A los
15 años pertenecía al Sindicato de la Metalúrgica de la CNT del Bergedà.
Durante la guerra civil, combatió como voluntario,
desde el mismo julio del 36, en que se integró en el Comité de Milicias
Antifascistas de Berga. En agosto se enrola en la Columna "Tierra y
Libertad", que lucha en el Frente de Madrid, pasando después por la
Columna "Carot y Castan" que combate en el Frente de Aragón, donde
fue ascendido a teniente en 1938.
Así la guerrilla de Massana, contaba con más de 50
bases en masías (Casa rural catalana) pueblos y ciudades donde los acogían y
daban soporte.
Al mismo tiempo recibía información de militantes
anarcosindicalistas que arriesgaban su vida, alternando en los bares que
frecuentaba la Guardia Civil. Aún y así, gracias a su movilidad, hacia de
Massana un ser totalmente ilocalizable.
Posiblemente, sea el único grupo guerrillero de todo
el estado español, que nunca tuvo una sola baja, ni muertos, ni heridos, ni
prisioneros.
Los pasos de montaña fronterizos que hacían servir
los grupos de Massana, para entrar clandestinamente en Catalunya, eran cuatro:
El primero, de Boan, cerca de Aix-Les-Thermes, cerca de Andorra, entrando por
el pueblo de El Serrat, después de siete horas de marcha. A continuación, en
coche, hacia Les Escaldes, y de allí subían al Port Negre, para bajar hasta
Castellnou de Carcolse, el primer pueblo de Catalunya.
Llegaban a las cercanías de la Sierra del Cadí,
atravesaban los Rasos de Peguera, y se dirigían hacía l’Espinalbet, cerca de
Berga y llegaban a Les Canals de Sant Miquel ,al sur de Vilada, cuartel general
de Massana.
El segundo paso consistía, en hacer el mismo trayecto
hasta El Serrat, y de allí a Aixirivell, pueblo andorrano cerca de la frontera,
desde donde bajaban cerca de la Seu, para dirigirse hacía la Sierra del Cadí.
Llegaban a las 4 horas de marcha, a Cornellada y después a los valles de
Tuxent, donde se escondían en masías de LLinàs y de Vellden, pueblos muy
cercanos a Berga.
El tercer paso lo hacían en coche desde Tarascon a
Aix-les Thermes o Font Romeu ,y caminaban hasta el pueblo de Osseja, después de
haber descansado en la base de Mas Tartàs entraban por la Collada de Tosses
hasta cerca de Castellar de N’Hug. A continuación, rodeaban La Nou, y se
dirigían a Vilada, y a les canals de Sant Miquel.
Y en el cuarto paso, hacían el mismo trayecto
anterior hasta la collada de Sant Salvador. Atravesaban la frontera, para ir a
parar a La Molina,
bajando hacía Guardiola de Berga. De allí, rodeando Vallcabre, y Cercs,
llegaban a los Canals de Sant Miquel por Sant Quirze de Pedret.
La primera incursión guerrillera, la hizo con 7
hombres, partiendo de la base del pueblo de Tarascon, donde se reunían en el
"Café des Sports", que hacía de la Federación Local de la CNT y allí
se tomaban las decisiones.
Los siete hombres, conducidos por Massana, iban
armados con ametralladoras, armas cortas y explosivos, forjados por la CNT de
Toulouse. Era el agosto del 45 y pasaron la frontera como siempre por los
caminos montañosos hasta el pueblo de Espinalbet, localidad de veraneantes
acomodados.
Entraron en la Iglesia, donde Massana, desde la
tribuna dirigió un discurso a los feligreses que estaban allí, informándoles
que harían una recolecta ya que no era justo que mientras unos habían de
subsistir con la cartilla de racionamiento, ellos se permitían el lujo de
veranear. Pasaron la bandeja y abandonaron sorprendidos la iglesia, después que
un feligrés dejará 12.000 pesetas de donación.
¿Cómo era Massana? Era un hombre alto y fuerte, de 27
años, seguro de si mismo, generoso y sentimental. Es fácil de comprender su
popularidad, y la leyenda que la gente se formó, sobretodo en el Bergadà,
debido a sus acciones espectaculares como la de aquel capitán de la Guardia
Civil de Berga que juró no descansar sin haber liquidado a Massana. Enterado
Massana que el oficial se encontraba en el Bar Colon, (de Berga) se presentó.
El guardia civil tomaba café y copa sentado en la mesa. Massana consumió un
carajillo (Café y coñac)en el mostrador y antes de irse dejó pagada la
consumición al capitán de la benemérita, al cual a la hora de pagar, se enteró
que acababa de ser convidado justamente por el hombre a quien pretendía cazar.
El capitán salió a la calle desesperado, pero,
lógicamente el Pancho (Massana) ya había desaparecido.
Pocos días después de estos hechos, alguien con
sentido del humor dedicó al oficial burlado una canción a través de radio
Andorra, emisora muy escuchada en aquellos años.
El éxito de las acciones del grupo de Massana se
basaba en la aplicación de una estrategia muy eficaz, el conocimiento del
terreno, palmo a palmo le permitía moverse con toda seguridad, tenía la
prudencia de no hacer bajas inútiles y de no enfrentarse con la fuerza de orden
público, solamente cuando fue absolutamente necesario; era muy astuto y
desconfiado como para no informar a nadie, ni a los compañeros del itinerario a
seguir.
Marcel.li Massana era estimado y admirado en el
Bergadà, y especialmente en las pequeñas poblaciones del Cadí. Los pageses
catalanes a pesar del enorme riesgo a que se exponían, le ayudaban con víveres
que él pagaba, y cobijo.
La guerrilla de Massana participó en secuestros de
personalidades significativas del régimen franquista, sabotajes, atracamientos
a fábricas y minas.
Pancho, sería durante seis años un mal sueño para los
millonarios estraperlistas franquistas y también para los industriales que
aprovechándose de la situación hacían trabajar de 12 a 14 horas diarias a sus
trabajadores.
Como guía, los grupos de Massana, llegarían a pasar
más de 50 personas de lado a lado del Pirineo. El viaje más emotivo fue cuando
ayudó a pasar un niño y una niña hasta Toulouse, donde les esperaba su madre.
El padre un comandante republicano había estado asesinado en Mauthausen.
Probablemente la acción más comprometida fue cuando
el dirigente cenetista José Peirats escogió a Massana para que le hiciera de
guía desde Francia hasta Berga, donde tuvo lugar una reunión, que duró varias
horas, dentro de un panteón del cementerio de Bergà que servía de escondite de
armas, mientras Massana y sus hombres montaban guardia, para proteger la
reunión. De igual manera la vuelta a Francia se hizo sin ningún contratiempo.
De secuestros, hubo dos de importantes: El primero
tuvo lugar en el año 49 en Can Flaquer, casa de campo cerca de Rocafort,
propiedad de Juan Fontfreda, alto cargo franquista de Barcelona, uno de los
capitostes del abastecimiento a Barcelona. La casa era una base del grupo de
Massana, ya que el Masover (encargado de la casa de campo) era amigo de Massana.
Pancho y los suyos sorprendieron al propietario
cuando éste llegó y le obligaron a que un hijo suyo saliera en busca de dinero
a Barcelona. Con este secuestro consiguieron 100.000 pesetas.
En el segundo en el Hostal del Alcalde de Vinars
consiguieron también 100.000 pesetas.
Un año después, cerca de allí, el grupo de Massana se
había refugiado en el Mas Casasaies, habitado por un masovero de la CNT. Se
presentaron tres guardias civiles y en el enfrentamiento murió un cabo de la
Benemérita, y los otros dos huyeron..Los masoveros al igual que los de Can
Flaquer tuvieron que ser trasladados al otro lado del Pirineo.
Los sabotajes consistían principalmente en voladuras
de torretas de alta tensión. Con tal de atacar al régimen, intentaban paralizar
la economía, y a la vez advertir a la población de la existencia del maquis.
En el verano del 45 en La Nau hicieron volar las
torretas de alta tensión y más tarde lo hicieron en la Plana de Vic.
Siete veces saboteada la conducción de energía de las
minas de lignito de Cercs, también cayeron los depósitos de agua de la fábrica
del Bergedà y Beges;
Y la voladura en tres puntos diferentes de la línea
eléctrica que va de Barcelona a Manresa y Vic.
Los atracos económicos iban dirigidos sobretodo a
industriales y adictos al régimen, así en Malanyeu expropiaron a un rico
requeté.
En Sant Corneli de Figols, requisaron los cafés, el
junio del 48.Asaltaron las oficinas de las minas de lignito de Cercs. En el 47
igualmente había sido asaltada la fábrica textil de "Senglàs
hermanos" en Avià.
Por dos veces en el 47 y 48 asaltaron en Hostalets de
les Liofes, cerca de Borradà al jefe de Falange local, terrateniente adinerado.
Un caso típico de acción de castigo psicológico
contra empresarios franquistas, se produjo en la fábrica textil de "La
Plana", donde el dueño abusaba de su autoridad, sobretodo con las mujeres
trabajadoras, enterado de este hecho, Massana, se presentó le hizo pasear en
calzoncillos por las naves de la fábrica, al Sr. Coloma delante de sus
trabajadores.
La guerrilla de Pancho mantuvo estrecho contacto, con
los grupos de Facerias, Quico Sabater y especialmente con Ramon Vila Capdevila,
que colaboraba en algunas acciones.
El éxito de las acciones tomadas por la guerrilla de
Massana fue actuar de una manera indiscriminada, y como represalia a las
fuerzas "del orden"; en la masía de La Creu del Perelló, cerca de
Castellnou de Bages, ejecutaron al matrimonio, Domènec Sardans de 50 años y
Ramona Rosa de 40 años, embarazada y madre de tres hijos
Miguel Guitó, de 56 años, tío de Pancho, fue detenido
junto a su hermano Jaime Guitó de 49 años de edad. Fueron los dos, torturados y
después se les aplicó la ley de fugas en un camino de carro cerca de la Colonia
Soldevila.
José Puertas, enlace de la guerrilla, José
Bartobillo, militante anarco-sindicalista y Juan Vilella, masover de Santa
Eugénia, base guerrillera de Massana, fueron ejecutados en noviembre del 49,
cerca del puente de Vilada, a las afueras de Berga. Murió también de las
torturas sufridas, Jaime Carballó, barbero de Sallent. Las detenciones y
encarcelamientos fueron numerosos.
Por lo que parece, detrás de tanta represión hay una
posible delación que podía venir de un antiguo y sospechoso militante cenetista
ex-fotógrafo del ayuntamiento de Berga.
Las montañas del alto Bergedà, La Sierra del Cadí no
serían controladas definitivamente por la Guardia civil hasta finales de los
años cincuenta.
A principios del 51, Marcel.li Massana iniciaría una
nueva vida en el exilio Francés.
No volvería a Barcelona hasta el año 79, en que fue
entrevistado por diversas publicaciones y diarios del país. Massana hombre de
inequívoca catalanidad, se sorprendió y disgustó por la castellanización de
Barcelona, hasta tal punto que se negó a donar propinas a los taxistas y
camareros que le hablaban en castellano.
Al volver a su casa en un pueblo del Ariege, a la
otra banda del Pirineo, murió en el año 81 de un ataque de corazón al lado de
su compañera Maria Calvó, el guerrillero del Bergadà leyenda de la voz popular.
CAPÍTULO QUINTO.
JOSE LUÍS FACERIAS
José Luis Facerias, conocido más por "Face" o por
"Petronio "por sus amigos y compañeros más íntimos, fue, juntamente
con Quico Sabater, uno de los exponentes máximos de la guerrilla urbana en
Cataluña, de los años cuarenta y cincuenta.
Jefe de guerrilla, era físicamente un hombre bien
plantado, elegante, un verdadero "Dandy".
Intrépido hombre de acción, destacó por su
excepcional talento y lucidez, llegando a ser uno de los organizadores más
capaces con que contó el maquis urbano libertario de la época. Muy pronto ocupó
cargos de responsabilidad, dentro del clandestino movimiento libertario
catalán.
Nacido en Barcelona el 6 de enero de 1920, en el 36,
estaba afiliado al sindicato de la Madera de la CNT y a las Juventudes
libertarias del Poble Sec.(Barrio Barcelonés).
Al inicio de la guerra civil, se alistó a la Columna
Ascaso, luchando durante toda la guerra en el frente de Aragón. En una de las
últimas batallas de Catalunya, cuando el ejército republicano se batía en
retirada, a principios de febrero del 39,fue hecho prisionero.
En este mismo año, perdió a su compañera e hija de
meses, cuando ambas iban camino de Francia. Huyendo, al lado de millares de
futuros refugiados. Probablemente, nunca llegaron a cruzar la frontera.
Ametralladas por los aviones nazis Messerchmitt, que sembraban la muerte de la
población que huía.
Facerias, pasó por diferentes campos de concentración
y batallones de trabajo, En Zaragoza, Vitoria y Extremadura.
Al ser llamada su quinta bajo el nuevo régimen
franquista, pasó de prisionero de guerra a soldado, destinado a una Unidad de
Transportes Militares en Barcelona, como conductor y poco más tarde, ocupó el
cargo de chofer particular del comandante del cuerpo jurídico Militar.
Licenciado a finales del 45, se incorpora al
sindicato de Industrias gráficas de la CNT y se pone a trabajar, primero de
camarero y después de cajero en el restaurante "La Rotonda", al pie
del Tibidabo.
Todo el tiempo libre de que dispone, lo dedica a la
actividad clandestina; Aún era la época de esperanza para muchos, de una
intervención aliada, acabada la segunda guerra mundial, de la intensificación
de la lucha del maquis rural y sobretodo urbano.
A partir de marzo del 46, (Facerias) fue el animador
más dinámico de los "Grupos de defensa" de la barriada barcelonesa
del Centro.
Intervino activamente, en las acciones de
organización y defensa, de las juventudes libertarias de Catalunya, las cuales
volverán a publicar, a partir del 46, "Ruta", su portavoz, que era
distribuido, por medio de sacas de películas, que se repartían por cines y
bares.
Detenido con otros militantes por la brigada
Político-Social, el 17 de agosto del 46, fue encarcelado en la Modelo, hasta
julio del 47, que salió en libertad.
En este mismo año, forma su grupo guerrillero y
realiza su primera acción: El atraco a la fábrica Hispano-Olivetti, de donde
consigue 300.000 pesetas y 100.000 más del Banco Español de Crédito, de la
calle Mallorca.
Facerias creía que la lucha armada era la manera más
rápida para obtener unos dineros que servirían de apoyo al Sindicato anarquista
y a los militantes presos y a sus familiares más necesitados.
De los atracos, cabe destacar, los ocho realizados
con su grupo, durante el año 46, con los que consiguió 3.000.000 pesetas,
entregados íntegramente a la organización. De estas ocho acciones cabe
destacar: la del Banco de Vizcaya de la Calle Rocafort, la del Banco de Bilbao,
la del Banco Hispano-Colonial, de la Diagonal y también de la calle Muntaner, la
de la Banca Pérez López de Hospitalet y la del Banco Hispano-Colonial de la
calle Mayor de Grácia. También, asaltó una fábrica de madera, en la carretera
del Puerto, la fábrica ICANSA, del Pueblo Nuevo y la empresa de Automóviles
Eucort.
A más de varios atracos a joyerías de Barcelona,
también se dedicó a visitar los "Meublés" de lujo frecuentados por
gente adinerada. El primero fue el de "Pedralbes" (Barrio Barcelonés
muy burgués) de donde se apoderó de los dineros y de las joyas de los clientes.
En agosto del 49; se presentó con otros activistas en "La Casita
Blanca"(Meublés muy conocido en Barcelona) de donde se llevó 37.000pesetas
y joyas; En mayo del 51 volvió a la "Casita Blanca"; y en octubre del
51 volvió al "Meublé" de Pedralbes.
Por lo que hace a los sabotajes, en agosto del 46,
desde un coche en marcha Facerias y sus hombres, ametrallan la Comisaría de
Grácia en la Travesera de Dalt, incendiaron los depósitos de un local de la
CAMPSA (Gasolina en España) en la calle Sepúlveda, en donde resultaron destruidos
40 coches y también actuó conjuntamente con el grupo de Quico Sabater en la
colocación de explosivos en los consulados favorables al ingreso del estado
Español en la ONU.
El 1 de abril del 50 -Conmemoración de la victoria
franquista-consiguió colocar un potente artefacto explosivo debajo de una
tribuna principal en el Paseo de Grácia, y distribuyendo por toda la ciudad, en
un coche robado, miles de octavillas antifranquistas, El ocho de abril haría
estallar una potente bomba en la comisaría de la Lonja, de la Calle Ancha
(Ample), resultando gravemente heridos seis policías y produciendo muchos
destrozos.
También, en la carretera de la Rebassada a Sant
Cugat, realizaría la "operación Documentación", (agosto 49) que
consistía en desviar los coches por un camino que conducía a la masía llamada
"Mas del Bosc",donde examinaban los pasaportes y la documentación y
se apoderaban de los de más interés para falsificarlos.
El armamento empleado por los grupos de acción de
Facerias, estaba compuesto de ametralladora "Stein" y
"Thompson", pistolas "Parabellum" "Walter P.38",
"Colt" calibre 45 "Star" calibre 9mm.largo, y bombas de
mano, carabinas americanas automáticas, detonadores, dinamita, trilita y plástico.
Facerias era un dirigente nato, que contó siempre con
la confianza de todos sus compañeros de lucha, la mayor parte de los cuales
morirían en enfrentamientos con la policía, o la guardia civil, como es el caso
de su mejor amigo y colaborador, Guillermo Ganuza Navarro o Antonio Franquesa y
César Saborit.
Facerias actuó en ocasiones conjuntamente con otros
grupos como es el caso del grupo de Quico Sabater, o el de Wenceslao Orive.
En el otoño del 51, después de la caída de tres
componentes del grupo de Facerias, la policía pudo conseguir de los detenidos
una cita a la que había de acudir Facerias el 26 de octubre. Este llegó en
bicicleta veinte minutos antes y no observó nada sospechoso, aunque la trampa
estaba ya preparada.
En la huída, "Face" se deja una cartera
donde llevaba una dirección de la Calle Arenys del (Barrio) Carmelo, (donde
guardaba armamento y propaganda antifranquista). Sin pensarlo dos veces se
dirige hacia la casa,
para llegar antes que la policía, y tener tiempo de llevarse lo más importante.
Cuando salía, fue asaltado, con fuego cruzado de armas automáticas, pero, pese
a todo, consiguió huir de nuevo. En el enfrentamiento habrá un agente muerto y
nueve heridos.
Durante los días siguientes se acordonarán islas
enteras de casas para efectuar registros. La policía Armada patrullaba por las
calles barcelonesas, en grupos de seis y en algún barrio los viandantes, fueron
constantemente molestados.
Todo esto, contribuía más a aumentar la popularidad
de Facerias en Barcelona, el cual llegó a adquirir como Quico Sabater, las
dimensiones de mito.
A principios del 52, Facerias huiría a Francia, pero
delante del riesgo de ser detenido por la policía francesa, que le buscaba y en
caso de detención lo habría extraditado a la policía española, decidió marchar
a Italia, donde entró clandestinamente por la montaña, el mes de junio del 52.
Allí colabora intensamente con los grupos anarquistas
italianos y tomó parte en la creación de los Grupos Anarquistas de Acción
Proletaria.
A pesar de que en el 53 la CNT del exilio francés
había desautorizado la lucha armada, Facerias decidió volver a Barcelona,
después de no llegar a un acuerdo conjuntamente con Quico Sabater, salió de
Toulouse acompañado de Luis
Agustín Vicente, alías "El Metralla" y del italiano
Goliardo Fiaschi. En la frontera notaron que había una intensa vigilancia, pero
ellos se hicieron pasar por excursionistas.
Equipados los tres con mochila y bicicleta siguieron
hasta Sant Joan de les Abadesses.
En Sant Quirze de Basora,"El Metralla" no
quiso seguir en bicicleta y cogió el tren.
Facerias y Galiardo, siguieron el viaje en bicicleta,
pasando cerca de Vic, bordeando el Montseny hasta llegar a Granollers, y de
allí a Mataró, y finalmente hacia el Tibidabo era el 27 de agosto.
Se refugiaron en una cabaña-Chalet, disimulada entre
los pinos del bosque de Sant Medir.
Aquella misma noche, era detenido "El
metralla", el cual se rindió sin oponer resistencia.
La policía no hizo ningún disparo: se trataba de
capturarlo vivo.
Al día siguiente, fue detenido Goliardo, cuando
volvía a la Cabaña/ Chalet del Tibidabo.
La policía montó guardia toda la noche, a la espera
de Facerias, pero éste no se presentó.
Sin tener noticias de la detención de sus compañeros,
el día 30, "Face" se dirigió hacia una cita, a las once de la mañana,
en la confluencia de las calles Dr.Urrutia y Pi i Molist, junto al Paseo de
Verdum, prácticamente delante de la puerta del manicómio de San Andrés.
Hacia las 11 y cuarto, unos agresores invisibles
disparan, herido, se mira la pierna derecha, tenía el tobillo fracturado. En un
instante vuelven a disparar. Facerias se incorpora con dificultad, con la idea
de salir de aquella trampa, se apoya el vientre en la baranda y dándose impulso
con las manos se deja caer al otro lado, en un solar de cuatro metros de
desnivel.
Aún pudo sacar una bomba de mano, pero desde unas
ventanas de la calle Nilo sonaban descargas de armas automáticas; el Cuerpo de
Facerias cae inmóvil, sin vida, con la bomba de mano en sus dedos crispados, su
cuerpo tenía nueve impactos de bala, la mayoría mortales.
Un número impresionante de policías y todo un
destacamento de la Guardia civil, estaban esperando, bien escondidos detrás de
las ventanas y de los terrados.
Su muerte, es posiblemente, como lo señalan todos los
indicios, debida a una delación del "Metralla" compañero del último
viaje el cual delató la cita, a cambio de salvarse él.
Con su muerte, nada más quedaban dos grupos
guerrilleros en Catalunya; El de Quico Sabater y el de Ramón Vila Capdevila.
CAPITULO SEXTO
QUICO SABATER LLOPART
A finales de diciembre de 1959, Quico Sabater con 4
guerrilleros más inicia el que sería su último viaje.
A pesar de que se sabía del intercambio de
información entre las policías española y francesa.
El Quico atravesó la frontera por Cuscoià. La guardia
civil estaba apostada por todos los pasos fronterizos en grupos de tres.
Había tropas de refresco apostadas en Albanya.
Mientras numerosas patrullas recorrían continuamente la zona
Desde 1945
a 1960 los grupos de acción de Quico Sabater
intervinieron en numerosos hechos. Transporte de armas de lado a lado del
Pirineo, atentados políticos, atracos, y otros actos de propaganda
antifranquista. En estas actividades Quico vería como caerían 15 de sus hombres
A lo largo de 16 años Francisco Sabater Llopart, fue
el enemigo número 1 del régimen franquista.
El febrero del 46 Quico pasó de nuevo la frontera con
un importante cargamento de armas entre sus hombres figuraban Ramón Vila
Capdevila "Caracremada". En Banyolas lugar donde había depositado el
armamento, en Ramón Vila mató a un guardia civil para salvar la vida de
Sabater, el cual pudo escapar disfrazado de pagés(campesino catalán) encima de
un carro, mientras tanto Banyolas era registrada minuciosamente por la
Benemérita (Guardia Civil)
Dos meses después Quico y sus hombres colocaron
bombas en los consulados de Brasil y Perú mientras el grupo de Facerias lo
hacía en el consulado de Bolivia como protesta afirmativa de estos países a la
entrada de España a la ONU.
Al cabo de un mes, en junio de 1949 Quico Sabater fue
encarcelado en Montpelier después de ser juzgado por tenencia ilícita de armas
y de explosivos. Cuando llevaba cuatro meses de cárcel moría en Barcelona su
hermano José víctima de un enfrentamiento con la policía, aún desde la prisión
francesa Quico se enteró del fusilamiento de su hermano pequeño Manuel en el
campo de la Bota después de un juicio fugaz
En cuatro meses la policía franquista incapaz de
cazar a Sabater había eliminado dos de sus hermanos, al cabo de trece meses de
condena, Quico Salía sale en libertad, en julio de 1950.
A principios de 1955 Francisco Sabater creó los
grupos anarcosindicalistas que tenían como portavoz la publicación "El
Combate" distribuida por las barriadas obreras barcelonesas y por los
pueblos y ciudades de Catalunya
El mismo año 55 en septiembre, con motivo de la
visita de Franco a Barcelona, Quico subió a un Taxi y se identificó como
policía que quería distribuir propaganda franquista y en una especie de mortero
construido por el mismo disparó proyectiles llenos de propaganda sembrando las
calles de Barcelona con octavillas de colores en Catalán y Castellano
Los atracos a Bancos fueron los hechos más
espectaculares realizados con el fin de recaudar fondos para ayudar a los
presos, a sus familias necesitadas y a sus compañeros, el más importante fue el
del Banco de Vizcaya de donde conseguiría llevarse 700.000 pesetas
En una oficina del Banco Central cerca del Borne
(abastecimiento Barcelona) llegaron Sabater y un compañero en un Taxi alquilado
como siempre, mientras Quico a punta de metralleta mantenía a raya a clientes,
guardias y empleados, el otro llenaba un cesto cómo para ir al mercado, al
salir Sabater dejó un objeto inofensivo delante de la puerta con una mecha encendida
mientras aconsejaba a los de dentro (del Banco) que se tumbasen en el suelo, se
fueron con el taxista que en ningún momento sospechó nada, ya que les esperaba
con el coche en la esquina.
También en Barcelona se llevó cerca de un millón de
pesetas de la Empresa Cubiertas y Tejados desde la calle todo el mundo se lo
miraba sonriendo a través de las grandes vidrieras, creyendo que allí dentro se
estaba filmando una película de gansters.
En estos últimos años Sabater se había presentado en
lugares frecuentados por obreros como Bares y comedores de las fábricas donde
pronunciaba pequeños mítines antifranquistas
El año 1956 y 1957, fue detenido nuevamente en
Francia y encarcelado por los motivos de siempre, tenencia ilícita de armas,
explosivos y también contrabando por el solo hecho de tener un aparato
transmisor: La policía española conectada estrechamente con la francesa influyó
decisivamente en estas detenciones
A finales de diciembre y inicios de enero del 57
serían detenidos 47 cenetistas en diversos lugares de Catalunya acusados de
colaborar con Quico Sabater, como tanto otras veces acorralado y perseguido,
Quico consiguió escaparse de Barcelona vestido de pagés, llegó en tren a
Hostalrich y continuó a pie hasta Francia, allí aún le esperaban 8 meses de
prisión en Montpelier seguido de un confinamiento de 5 años en Dijon
En diciembre de 1959 a las puertas de un
nuevo juicio por tenencia ilícita de armas, decidió la huída hacia adelante, y
emprendió la que sería su última incursión contra el franquismo, le acompañaban
Antoni Miracle Guitart, de 29 años, Francisco Conesa Alcaraz de 39, Roger
Madrigal Torras, de 27 y Martín
Ruiz Montoya de 20 años.
Es el 3
de enero de 1960, en el "Mas Clarà" cerca de Gerona, Quico Sabater se
encuentra herido rodeado de numerosos efectivos de la guardia civil, el rodeo y
el tiroteo se prolongará todo el día hasta la noche
Quico Sabater herido en la pierna, en las nalgas y en
el cuello recorre siempre de noche unos 25 kilómetros hasta
llegar de madrugada a la estación de Fornells, a punta de pistola sube a la
locomotora del Tren correo y obliga a los dos maquinistas a que no se detengan
hasta llegar a Barcelona, pero en Massanet Massanas es preciso cambiar la
locomotora de Vapor por una de eléctrica, Quico cambia de Máquina, y los
maquinistas aprovechan para alertar a la guardia civil, a dos minutos de Sant
Celoni con la pierna ya cangrenada Quico salta del tren con la intención de
recibir asistencia médica
En todas las poblaciones a lo largo de la línea
férrea hasta llegar a
Barcelona la Guardia civil espera a Sabater, Quico sin
fuerzas pide la dirección del médico a un pagés pero se equivoca y llama a la casa de Francisco
Berenguer delante de la del doctor Barrios, Berenguer al ver el mal aspecto de
quien llama tan temprano a la puerta y observando que lleva una metralleta
escondida, se pone nervioso y se abalanza sobre Quico con el fin de quitarle el
arma, mientras tanto Martínez Collado sargento de la guardia civil los
somatenista Abel Rocha falangista notorio y Pepito Sebina ex-legionario ya han
localizado al fugitivo, largamente esperado.
En un pacto de sangre mantenido aún hoy, en un pacto
de silencio mantenido por los tres hombres el somatenista descargó su
metralleta en la cabeza del Quico después de muerto, desfigurándolo hasta el
punto de que ni su hermana pudo identificarlo.
CAPITULO SEPTIMO
RAMÓN VILA "CARACREMADA"
Ramón Vila Capdevila, también conocido como
"Pasos Largos", "Caracremada" y por "Capitán
Raymond" en la resistencia francesa, fue uno de los más destacados
guerrilleros del maquis catalán.
De un valor y coraje personal extraordinario no
toleró nunca al fascismo, al que combatió hasta la muerte.
El otro jefe guerrillero del Bergadà, Marcelino
Massana, decía de él: "En Ramón fue, sin duda, el mejor de nosotros".
Era un hombre alto, con una gran fuerza física. De
cuerpo ancho, y de semblante enérgico, ojos vivos, frente ancha con un aire
entre selvático y tímido. Era sencillo y modesto, con gran agilidad.
Nacido en el pequeño pueblo de Pequera, en el
Bergadà, en 1908, le pequeño le decían "En Maroto" que era el nombre
de la masía donde vivía.
Tenía 12 años, en el agosto de 1920 cuando se
encontraba con su madre, Dolores, en la recogida de las legumbres, en un día
muy nublado. Empezó a llover y de golpe, una luz vivísima seguida de un gran
trueno cayó sobre ellos, la mujer muerta y quemada la cara de su hijo Ramón.
Dos años más tarde, cuando tenía 14 años se marchó a
trabajar a una fábrica textil de la Pobla de Lillet.
En aquellos años, los años veinte, muchos industriales
barceloneses, o de otras zonas industriales, con tal de aumentar sus ganancias,
trasladaban las industrias sobretodo textiles, hacia la zona alta del
Llobregat, pagando sueldo de miseria, ejerciendo una explotación y caciquismo,
verdaderamente humillantes. Con el fin de sobrevivir, niños y niñas de nueve a
catorce años, habían de trabajar durante 10 o 12 horas diarias.
Así, en este ambiente de injusticia social, que todo
el mundo sufría, día a día, Ramón Vila, debido a su carácter y temperamento rebelde,
participa desde muy joven en las luchas obreras de la Cuenca minera del
Bergadà.
En la Poble de Lillet trabajaba 11 horas diarias,
allí llevó a término su primer sabotaje, en el invierno del 29 al 30, contra un
empresario que acababa de renovar su maquinaria y dejó sin trabajo a un
centenar de compañeros suyos. Así, un sábado por la noche, colocó explosivos en
la nueva maquinaria, pero una carga explotó antes de hora, hiriéndole en la
cara y en las manos.
Como consecuencia de este atentado fue detenido y
encarcelado en Manresa. No recobró la libertad hasta el 14 de abril del 31, es
decir, hasta la proclamación de la república.
En el mismo mes de abril vuelve a Pobla de Lillet,
pero no encuentra trabajo, y se va a trabajar a las minas de carbón de
Figols, donde enseguida destaca como líder entre los mineros cenetistas.
Todos los domingos bajaba de Figols a Berga, andando,
para ver a su hermana pequeña, que vivía con unos tíos y a la que quería mucho.
Ramón, después de ver a su hermana, se volvía a
Figols al atardecer. A veces, sus idas a Berga tenían otro sentido, bien
diferente.
Ramón participó en el levantamiento del Alto
LLobregat del 32. esto le valió la cárcel durante seis meses primero en Manresa
y luego en Barcelona.
En el verano del 32, a la salida de la cárcel,
se fue a hacer de leñador y de pagés, volviendo a Figols hacia febrero del 36 a trabajar de nuevo en las
minas.
Este mismo año, baja a Barcelona en una muestra de
solidaridad con los huelguistas del tranvía, interviene activamente en la
huelga, que querían abortar los "escamots" (Comandos) de Estat
Català, que la querían hacer fracasar.
Fue detenido y encarcelado en la Modelo de Barcelona,
para ser destinado, después del juicio a la cárcel de Sant Miguel de los Reyes
en Valencia.
Fue liberado por los trabajadores, el 19 de julio del
36, al inicio de la guerra. Se alistó en la Columna de Hierro, valenciana, y
pasó a luchar en el frente de Teruel, hasta marzo del 37, en que fueron
militarizadas todas las columnas.
Entonces, vuelve a Figols donde va a trabajar como
minero, y participa en la colectivización.
En 1937,cuando llaman a su quinta del 28, se fue con
su amigo Ramón Casals i Casafont, a la 153 Brigada antes Columna Tierra y
Libertad.
En el 39 se exilió en Francia, donde fue internado en
el campo de concentración de Saint Cyprien. En 1940 fue trasladado al campo de
Argelés, donde se escapó al poco tiempo de llegar. Juntamente con otros
libertarios, pasó a
organizar la resistencia libertaria en Catalunya, con la
creación de grupos volantes, que actuaban en uno y otro lado de los Pirineos.
Fue detenido el 43, por los alemanes, en Perpiniàn, por no llevar documentación
suficiente, donde estuvo preso durante dos meses en el Castillet.
Tuvo que trabajar con los alemanes, en la
organización TODT, en una mina de aluminio en Bédarieux cerca de Nimes, hasta
que en 1944, logra escaparse, y se reintegra en la resistencia francesa de
Lemoges, hasta que ingresa en el famoso maquis de Rochechouart, en l’Haute
Vienne, donde se le conocería por "Capitán Raymond". Lucha primero,
con "L’Armés Secrète", y después con los
"Franc-Tireurs-Partisans".
En el maquis francés, actuó en todos los combates de
lucha abierta, pero se negó sistemáticamente a tomar parte de operaciones de
limpieza y escarmiento.
Así, no permitió nunca que se fusilara a ningún
hombre.
El Capitán Raymond decía: "Ni durante la
revolución en Catalunya, ni en la resistencia en Francia, nunca quise
intervenir en ejecuciones ni en nada parecido. Un enemigo vencido ya no es un
enemigo, y matar hombres indefensos no es propio de los hombres".
Su especialidad eran los sabotajes, hizo saltar un
gran número de trenes blindados alemanes, especialmente uno de la SS, con
tanques y material bélico pesado, que se dirigía a Normandia cuando ya había
tenido lugar el desembarco de los aliados.
Como represalia, algunos destacamentos motorizados
alemanes de la 2ª
Panzer división llegaron al pueblo de Orador sur Glane y quemaron vivos a los
1500 habitantes del pueblo.
Como respuesta a esta acción contra la población
civil, el "Capitán Raymond"· y los 200 guerrilleros de "L’Armés
Secrète" asaltaron y aniquilaron toda una división alemana en Oradour sur
Véze.
Ramón Vila imprimió en su grupo, su experiencia y la
eficacia guerrillera, convirtiéndose en uno de los grupos más legendarios de
l’Haute Vienne.
Aún hoy, ésta vivo en la memoria popular de esta
región francesa del maquis del "Capitán Raymond".
Su dedicación y su valor fueron reconocidos por las
autoridades francesas, que le concedieron el máximo galardón, el de la legión
de Honor, que naturalmente, el rechazó.
Después de ser aniquilado el último reducto nazi en
Francia, se dirigió hacia el sur,
no muy lejos del Pirineo, pasando una temporada en "Mas d’Azil", con
su amigo de Berga, Ramón Casals. Los dos se ganaban la vida haciendo macarrones
y fideos con una maquineta. Más tarde encontrará trabajo en una línea
telefónica.
Vuelve a Catalunya, para continuar su lucha contra el
franquismo.
Hacía de guía de la CNT, con el nombre de Ramón
Llaugí, atravesando en múltiples ocasiones el Pirineo, tanto para transportar
cargamentos de armas para los grupos de acción, como para trasladar activistas
al otro lado del Pirineo.
Colabora con diversos grupos de guerrilleros, como
los de Facerias, Massana y Quico Sabater.
Ramón Vila creía que el sabotaje contra las torres de alta tensión e
instalaciones de suministro eléctrico, era la única manera de acabar con el
régimen franquista, la única opción a su alcance para acabar con la economía
del estado.
El mayo del 47, a raíz de una visita de Franco a las minas de Sallent, el
día 17, dirigió un grupo de 50 guerrilleros, que tenían que atentar contra el
Dictador, pero debido a un accidente tuvieron que hacer marcha atrás.
El 48 y 49 "Caracremada" dinamita por dos
veces las conducciones eléctricas de los carburos de Berga y también las líneas
de alta tensión entre Prats de Lluçanes y Berga.
El año 1953, la CNT en el exilio desautorizó la lucha
armada, pero "Caracremada" mantuvo el combate por su cuenta, que él
había empezado en 1930 en el Alto Llobregat. Fue inútil la conversación que
mantuvo el año 59, en Prada de Conflent con Marcelino Massana, el cual le
quería convencer para que dejara la lucha armada.
Faltó muy poco, para que Massana que ya había dejado
las armas en el 50, las volviera a coger y unirse a Ramón.
Hasta 1963, realizó diversas incursiones en
Catalunya, principalmente en las comarcas del Bages y del Bergadà. Des de las faldas del Canigó,
entraba en Catalunya por la
Molina, la Collada de Toses, Vall-Ter o Setcases.
Ramón Vila contaba con la ayuda de numerosas masías
donde podía dormir y comer, sobretodo en la zona de Prats de Lluçanés, donde
entonces todavía había militantes campesinos en la clandestinidad.
Las incursiones las solía hacer de primavera hasta el
verano, a veces solo, y otras acompañado de un grupo o con otro guerrillero.
Quien también le acompañó muchas veces fue otro guía
de montaña llamado Jesús Martínez Maluenda "El maño" que aún hoy,
desde su exilio de Toulouse nos acerca a la figura difuminada de Ramón Vila
Capdevila.
Paradójicamente, Ramón fue uno de los guerrilleros
que más actuó, y del que menos acciones se conocen, a causa de su modestia y de
su carácter introvertido y personalista, y del hecho que todos sus compañeros
de lucha murieron en combate o fusilados.
La última acción de Ramón Vila
"Caracremada" fue a finales de julio de 1963. Atravesaba el Pirineo
por cerca de Solsona, Serra del Pinós y seguía por el Cardoner, hasta llegar a
Palà. Después fue hacía Camps y Fals, y siguió hasta Sant Joan de Vilatorrada,
por los contornos de Coll-Baix. Seguía por la Font de la Rel y el margen del
riachuelo de Rajadell. Seguía la vía férrea, hasta llegar al desnivel de Can
Prim.
Allí se detenía. Su objetivo -(una vez más) eran las torres de conducción de
líneas de alta tensión que suministraban energía eléctrica a Barcelona.
El 2 de agosto hacia las once de la noche colocó las
cargas en las torretas. La explosión se produjo a primeras horas de la
madrugada. Y reemprendió el camino de vuelta, Pero de las tres explosiones,
nada más que sintió dos, y en contra de su acostumbrada prudencia, se volvió
hacia atrás para comprobar la explosión de la tercera carga.
Cuando llegó comprobó que las tres torres habían
caído. Cuando aún era de noche (día 3) volvió hacia la zona de Calders.
Atravesando el río Cardener, se internó por el bosque
que se extiende entre Sallent y Balsareny. La noche del 6 al 7 de agosto
atravesó el río Llobregat en dirección hacia Calders.
El día 7 de agosto a las 12’30 noche caía mortalmente
herido, el último guerrillero catalán en un enfrentamiento con la Guardia
Civil, en el que no tuvo ni tiempo de disparar, en el paisaje de la Creu del
Perelló, situado entre los términos municipales de Castellnou de Bages y
Balsareny.
Su agonía duró hasta las siete de la mañana. Murió
con la espalda acomodada en su mochila. En las manos aún empuñaba una
metralleta. Estuvo agonizando toda la noche, ya que la Guardia civil de la 231
comandancia de Manresa, compuesta por unos 200 guardias, no se atrevieron a
acercarse
Inmediatamente, corrió la noticia por las comarcas
del Bages y del Bergadà, como un relámpago: "En Maroto és mort !l’han
matat les caderneres!" ("Maroto -R.Vila- esta muerto! lo han matado
los pájaros cantores ) (un refrán catalán que no tiene sentido en castellano).
Fue enterrado, en la otra banda del muro del
cementerio de Castellnou de Bages, sin cruz ni referencia, olvidado entre el
follaje.
El 7 de octubre del 78, a Sallent, la CNT hizo un
homenaje al cual acudieron más de 2000 personas la mitad de las cuales
provenían de la comarca. Pero el acto fue prohibido por el gobernador civil, y
el pueblo fue ocupado por la Guardia civil, al igual que el cementerio donde
esta enterrado. Después de 15 años de su muerte, aún no le perdonaban su vida
revolucionaria.
En 1978, volvía a ser un "Malhechor "
"facineroso", "peligroso criminal" y "Bandido a sueldo
de los enemigos de España exiliados en el extranjero",según el estilo
noticial del periodista Enrique Rubio. A los 25 años de la muerte de Ramón Vila
Capdevila, final histórico del maquis antifranquista en Catalunya, no hay
ningún rastro, ningún recuerdo, ¿porqué quién gobierna aceptaría aquellos que
no aceptan gobierno?.
______________________________________________
“Los Guerrilleros Anti-Franquistas: El estertor de la ametralladora Thompson”
Por Grupo Camilo Berneri
La
guerra de guerrillas contra el Franquismo surgió realmente en los días que
siguieron al levantamiento del ejército contra la República Española el 18 de
junio de 1936. En las áreas que cayeron inmediatamente bajo el control del ejército
rebelde, una sangrienta represión obligó a muchos antifascistas a esconderse en
los montes cercanos para salvar sus pellejos. Esto se repitió en todas las
regiones que caían en manos del ejército franquista, una tras otra, hasta que
las últimas tropas republicanas se rindieron en la zona centro-levante de la
península el 31 de Marzo de 1939.
Muy
poco se ha escrito sobre la escala de la lucha armada contra Franco al terminar
la Guerra Civil. Y todavía se conoce poco de esto. Un grueso muro de silencio
ha acallado a los combatientes, por muchas razones. Según un amigo íntimo de
Franco el teniente-general Camilo Alonso Vega - que estuvo al mando de la
campaña contra la guerrilla durante 12 años - el bandidismo (término con el que
el franquismo calificaba a las guerrillas) tenía "gran significancia en
España, interrumpiendo comunicaciones, desmoralizando al pueblo, arruinando
nuestra economía, deshaciendo nuestra unidad y desprestigiándonos ante el mundo
entero".
Días
antes de que estas palabras salieran a la luz el general Franco mandó silenciar
los informes sobre la oposición armada y los esfuerzos que se hacían para
combatirla, cuando declaró que "los sacrificios de la Guardia Civil tras
la 2ª Guerra Mundial quedaron en silencio porque, por razones políticas y de
seguridad, era inapropiado publicar las localidades, combates y muertos de
aquellos que cayeron en el cumplimiento del deber, en un sacrificio heroico y
silencioso".
Este
silencio ha continuado hasta nuestros días. En un programa de Televisión
Española (TVE) llamado Guerra de guerrillas y difundo en 1984, el General
Manuel Prieto López cínicamente se refirió a los luchadores anti-franquistas
como bandidos y asesinos. No debería causar sorpresa - durante el período de la
transición política a la democracia (de noviembre de 1975 a octubre de 1982)
todas las fuerzas políticas, grandes financieros, industriales, el ejército y
las autoridades de la iglesia decidieron que esas referencias al pasado eran
inapropiadas y que el baño de sangre de la era Franco debería ser olvidado. Ese
consenso sigue vigente en 1996, y así los historiadores que desean levantar ese
velo encuentran dificultades insuperables cuando tratan de examinar archivos
estatales, de la Guardia Civil o Policiales.
No
tenemos cifras fiables de los datos globales de las guerrillas o de las bajas
recibidas o infligidas a las Fuerzas Armadas. Sí podemos tener, entonces algún
dato de como fue esta lucha desigual contra la dictadura, nuestra única opción
es echarle un vistazo a las cifras hechas públicas en 1968 - parece un ejemplar
único - según los cuales la Guardia civil tuvo 628 bajas (con 258 muertes)
entre 1943 y 1952: unos 5.548 bandidos fueron puestos fuera de juego en 2.000
escaramuzas, muchas de las cuales fueron batallas de gran escala. Las cifras de
esta erradicación son las que siguen: Muertos - 2.166: Capturados o entregados
- 3.382: Arrestados como enlaces, cómplices o instigadores - 19.407. Un
silencio avergonzado cubre los anteriores años de entre 1939 y 1942, cuando las
unidades del ejército regular, la Legión extranjera y los Regulares, con apoyo
de la artillería intentaron aplastar las guerrillas. Las cifras anteriormente
dadas de las bajas de la Guardia civil a manos de las guerrillas pueden quedar
empequeñecidas. Si comparamos las listas de Guardias civiles difuntos durante
estos años en los que no se informaba de la causa de muerte con las tasas de
mortalidad de los tiempos de paz, encontramos un excedente de muertes que son
(asumiendo que fueran los resultados de enfermedades o accidentes)
inexplicables y llegan a lo que es incuestionablemente una cifra más cercana a
la verdad: unas 1.000 muertes en servicio activo.
La
escalada de la actividad guerrillera dio comienzo en 1943, cuando la creencia
de que el Tercer Reich tenía la victoria en sus manos comenzaba a desvanecerse,
tras la cruenta derrota de las divisiones de élite alemanas en Stalingrado.
Según la marea de la Segunda Guerra Mundial cambiaba de dirección, las
guerrillas anti-franquistas, como podría esperarse, volvían a tener moral de
victoria y dinamismo, y de 1944 en adelante florecieron en un grado
considerable. Su apogeo fue en 1946-1947. Tras esto, en parte a consecuencia de
la política internacional que buscaba una reconciliación con Franco, comenzó
una decadencia que terminó con la defunción de la actividad guerrillera en
1952. En Barcelona, Madrid, Valencia y otras ciudades, la actividad de la
guerrilla urbana persistió por una década o más.
Después
de 1944, las guerrillas que operaban dentro de España recibieron refuerzos
considerables de sus compatriotas exiliados que habían tomado una parte activa
en la liberación de Francia. Estos eran hombres bien entrenados y
experimentados acondicionados con armamento moderno y facilidad para usar
sustancias explosivas de gran potencia como el explosivo plástico. La mayor
parte de ellos vino de Francia y un número más pequeño a través del mar desde
África del Norte. Los líderes comunistas con intención de dar carácter político
a la actividad guerrillera llegaron de las Americas por Lisboa y Vigo. Los
comunistas que tomaban por seguro que el grito de guerra de "¡Recuperemos
España!" iba a ser la señal para una insurrección popular contra el
régimen de Franco hicieron grandes promesas sobre la masiva ayuda que iba a
venir.
Unos
3.000 guerrilleros organizados en Francia con el mismo armamento que habían
usado en su guerra contra los nazis, hicieron dos ataques principales a través
de los Pirineos en 1944. La primera incursión fue a Navarra el 3 y 7 de
octubre: La segunda vino por Cataluña, con el objetivo de establecer una cabeza
de puente en el Vall d'Aran e instalar un gobierno Republicano provisional. Se
daba por descontado que, confrontados por tal hecho consumado, los Aliados iban
a entrar en España para tumbar a Franco. Estas incursiones fueron fácilmente
rechazadas - habiendo estado anunciado con antelación el avance - pues el
gobierno español había tomado todas las medidas apropiadas. Aun así, hubo
montones de guerrilleros que rehusaron regresar a sus bases y optaron, en lugar
de eso, por infiltrarse en el interior de la península en pequeños grupos. Allí
dieron apoyo a las guerrillas existentes y crearon nuevas allí donde ninguna
existía.
Las
armas que trajeron eran bastante más efectivas y más adecuadas para la lucha de
guerrillas. El arma más común era la pistola británica Sten, o el M.P 38
alemán. Ambas eran armas de tiro rápido y munición usada de 9 m/m era el tipo
más abundante. Armas americanas como la pistola Colt llegaron a montones, como
hicieron (en menor número) subfusiles Thompson, un arma más pesada pero
altamente efectiva. Un disparo de la Thompson en el monte sonaba como un
disparo de artillería. Los combatientes que llegaron ya estaban bien entrenados
y su moral estaba forjada por las victorias contra los nazis y la creencia de
que Franco no podría sobrevivir tras la caída de Hitler y Mussolini. Tenían
además una amplia experiencia organizacional tras ellos y unas fuertes
convicciones ideológicas, anarquistas, comunistas y socialistas, cualidades que
transformarían el fenómeno guerrillero dándole coherencia y uniendo las
incontables bandas guerrilleras que operaban en España.
Las
regiones principales de actividad guerrillera fueron aquellas cuyas
características geográficas hacían de la defensa y la supervivencia más
probable: por ejemplo las cadenas montañosas. En Andalucía había numerosas
bandas, algunas de ellas de más de 100 miembros. En Asturias, las guerrillas
desplegaron una actividad tremenda, no estando desconectadas de una conciencia
política enraizada: La revolución de los mineros de Asturias en octubre de 1934
no estaba tan alejada en el tiempo. En muchas áreas, la actividad de la
guerrilla fue intermitente y aleatoria según estas se movían por un número de
razones, como las intrusiones de las Fuerzas Armadas de contrainsurgencia.
El
estilo y la naturaleza de la lucha de la guerrilla cambiaban dependiendo del
terreno y los recursos de los individuos y grupos involucrados. Las actividades
incluían las voladuras de objetivos estratégicos, atentados (asesinatos
políticos), el movimiento de armas, la protección de individuos y grupos
involucrados en actividades políticas clandestinas; atracos de bancos y
falsificación para financiar la lucha y desestabilizar la economía; Así como
acciones más espectaculares: Las misiones de rescate para liberar a colegas
capturados, combates a tiros con fuerzas fascistas; ¡y un intento para
bombardear a Franco desde el aire! (tres hombres en una avioneta que fallaron
por un pelo el lanzamiento de varias bombas incendiarias y de fragmentación
sobre el General y sus ayudantes durante una regata en 1948).
Un
ejemplo que resume la mentalidad y espíritu del movimiento de la guerrilla de
la época lo da un pequeño grupo de guerrilleros anarquistas, liderados por
Francisco (Quico) Sabaté Llopart veterano combatiente. En su regreso a España
tras el fin de la Segunda Guerra Mundial una de sus primeras misiones fue la
"expropiación" de dinero y artículos de valor en una serie de robos a
los grandes hombres de negocios locales. Tras terminar el "negocio",
los "visitados" recibían una una nota como la siguiente, que se
recibió en casa de un rico dueño de unos grandes almacenes, Manuel Garriga:
"
No somos ladrones, somos resistentes libertarios. Lo que hemos tomado
justamente ayudará en una parte muy pequeña a alimentar a los niños huérfanos y
muertos de hambre de los antifascistas que usted y los de su clase han
fusilado. Somos gente que nunca hemos y nunca mendigaremos lo que es nuestro.
Siempre que tengamos fuerzas para hacerlo pelearemos por la libertad de la
clase obrera española. Por lo que respecta a usted, Garriga, aunque usted es un
asesino y un ladrón, no le pasará nada, porque como libertarios apreciamos el
valor de la vida humana, algo que usted nunca, ni es probable que lo haga,
entenderá "
Un
pequeño ejemplo de cómo, a despecho de la pérdida de la guerra, y a pesar de la
inclemencia de la represión fascista, los involucrados en la resistencia
todavía eran capaces de mantener su política, su humanidad, y su respeto por sí
mismos.
La
oposición armada a Franco ya no fue un problema serio tras 1949 y, como hemos
dicho, se apaciguó alrededor de 1952. Además de los duros golpes dados por la
Guardia civil y el ejército, la ausencia de un sistema logístico capaz de
mantener a los combatientes equipados, y, por encima de todo lo demás, el hecho
de que la oposición que los partidos políticos de oposición había apostado por
la diplomacia como sustituto de las armas, lo que imposibilitó mantener la
actividad ofensiva de resistencia.
Otro
elemento altamente significativo en el estado de la marcha de la lucha de las
guerrillas fue la llegada a escena en 1947 de fuerzas excelentemente
adiestradas que tomaron la forma de contra-guerrillas, vestidas y armadas al
estilo de las guerrillas y sembrando la confusión y el terror en su propio
terreno. Estas "contraguerrillas" incluso hicieron salvajes
asesinatos que se atribuyeron a las guerrillas auténticas, su objetivo era
desprestigiarlas y quitárlas el apoyo popular. No obstante, la infiltración de
la policía en las guerrillas fue extraordinariamente efectiva e hizo posible
desmantelar alguno de los más importantes grupos.
En
Asturias, en 1948, unos 30 guerrilleros socialistas subieron a un barco de
pesca francés que había llegado específicamente llevarlos a St Jean de Luz en
Francia. En Levante, las últimas guerrillas que quedaban en la zona, unas dos
docenas de sobrevivientes, fueron a Francia en 1952. En Andalucía, algunas
bandas sobrevivieron hasta 1952, pero sus líderes - como el anarcosindicalista
Bernabé López Calle (1889-1949) - ya había perecido en las batallas. Unos
cuantos lograron escapar a Gibraltar o a África del Norte, pero, en la mayoría
de los casos, cayeron en combates armados: otros fueron ejecutados por garrote
vil o pelotones de fusilamiento; los que escaparon a este destino sufrieron
penas de prisión de hasta 20 años.
En
1953, los Estados Unidos firmaron un tratado de asistencia militar y económico
con Franco. Dos años más tarde, la España de Franco fue bienvenida en las
Naciones Unidas. Sin embargo, si bien todo estaba perdido, algunos rehusaron a
dejar la lucha: En Cantabria, los últimos dos guerrilleros, Juan Fernández
Ayala (Juanín) y Francisco Bedoya Gutiérrez (el Bedoya) murieron en abril y en
diciembre de 1957 respectivamente. En Cataluña, Ramón Vila Capdevila
(Caraquemada), el último guerrillero anarquista, fue acribillado a balazos por
la Guardia civil en agosto de 1963. Pero el honor de ser el último guerrillero
lo tiene José Castro Veiga (el Piloto) que murió, sin haber dejado nunca las
armas, en la provincia de Lugo (Galicia), en marzo de 1965.
Hay
un número de razones para el fracaso de la campaña guerrillera contra Franco, y
aunque la guerra de guerrillas abierta acabó en los 50's, el movimiento contra
Franco continuó, como lo hizo la actividad política clandestina, hasta el
colapso final del régimen. Lo que habían querido las guerrillas lograr era
insurrección abierta contra Franco. Lo que nos demuestran hoy, a través de su
ambición y su sacrificio, es que con la represión brutal de después de la
Guerra civil la clase obrera no se quedó quieta. La historia plena de la guerra
de guerrillas, como Téllez declara en su artículo, está todavía por escribirse.
Todo lo que podemos hacer hoy es saludar a los hombres y las mujeres de la
resistencia que dieron sus vidas, no sólo en la defensa de su clase, sino por
un futuro donde las estructuras que creó Franco, fueran sepultadas con él.