El 28 de junio de 1969, la policía llegó al Stonewall Inn de Nueva York. Este bar es reconocido en las comunidades gay, lesbiana, bisexual y trans por dar la bienvenida incluso a los más marginados. Como de costumbre, la policía estropeó la fiesta.
Pero la respuesta no se hizo esperar: miles de personas - gays, travestis, drags y trans - se enfrentaron a la policía toda la noche. Ese mismo día y durante las cinco noches siguientes, toda una comunidad se enfrentó a la injusticia y la crueldad policial.
Las marchas del orgullo como existen ahora en muchas ciudades del mundo cada junio, conmemoran los disturbios de Stonewall y sirven para defender los derechos de todas las personas que no encajan en los estrechos confines de la heterosexualidad que los reaccionarios quisieran imponer como norma universal.
Lamentablemente, también conmemoramos este año el quinto aniversario del ataque de Orlando, un crimen masivo homofóbico, transfóbico y racista que se cobró la vida de 49 personas y dejó 59 heridos en Estados Unidos. La lucha está lejos de terminar, ya que la violencia contra las personas «queer» aumenta en muchos países. Luchar contra la queerfobia es luchar contra la violencia masiva. ¡Es una necesidad!
La homofobia es un trampolín para el fascismo
En el mejor de los casos, los gobernantes solo pretenden prevenir tal violencia cuando no lo hacen, como en países como Rusia, Hungría y otros, reforzando activamente la represión legal sobre las personas queer. En Turquía, el fascista Erdogan ha prohibido todas las acciones del movimiento LGBTI+. Un pequeño picnic terminó siendo duramente golpeado por la policía. En otros países, los activistas de extrema derecha y los hooligans hacen el trabajo sucio por ellos. En Francia, por ejemplo, unos 80 fascistas atacaron la marcha de Dyke en Lyon, que se había reunido en abril por el orgullo lésbico y el derecho a acceder a la tecnología de reproducción asistida. A su vez en Brasil, Bolsonaro y sus seguidores/as han estado agredido verbalmente a las disidencias sexuales y de género, direccionado los ataques desde la gente común y los grupos de odio hacia esta población. Brasil, el país que más asesina a personas trans diariamente en el mundo, tiene un presidente que abiertamente abraza e incentiva la violencia homofóbica y transfóbica. Este mes de junio, una mujer trans de 40 años fue incinerada en la parte baja de la ciudad de Recife, Pernabuco, un crimen despreciable que vemos todos los días. Estos ataques son unos de los muchos actos característicos de la ideología homofóbica (o mejor homoodiante y transodiante, porque no se trata de ningún miedo), un trampolín para el nacionalismo y el fascismo.
Las disidentes empobrecidas enfrentan peores cosas
Aunque la homofobia, la transfobia y los actos de odio afecten a toda la comunidad LGBTI+, debemos señalar que son las disidentes de los sectores más empobrecidos quienes están en una peor situación. En este sentido, señalamos que la discriminación, y, consecuentemente, la exclusión, aún generan muchas dificultades hoy por el acceso a la salud y la educación. Además, la brutalidad de la violencia machista tiene un efecto considerable en el número de transfeminicidios y violencia focalizada en las personas queer. Analizando detenidamente las estadísticas, en América Latina, la mayoría de las víctimas de actos de odio pertenecen a las clases más empobrecidas, quienes están más expuestas a la prostitución, abuso de drogas, persecución policial, trabajo informal, etc. Vemos también como el racismo juega un rol importante. Las disidencias sexuales y de género pertenecientes a comunidades negras e indígenas son sujeto de mayor opresión diariamente. Ellos/as son con frecuencia obligados/as a esconderse y vivir en una doble clandestinidad en las sociedades en dónde asientan.
Luchar contra la queerfobia es parte de la lucha anarquista
Defendemos el derecho de las personas queer tanto de establecerse como de transitar por donde se quiera, y su derecho a la existencia. Pero como coordinación internacional, también afirmamos que combatir eficazmente la queerfobia no se trata solo de hermosos discursos progresistas. Es una lucha larga y diaria por la igualdad de derechos y contra todos los actos, comentarios y comportamientos homofóbicos y transfóbicos, la opresión sistémica manifestada en el sistema de salud y educación, y más ampliamente contra todas las opresiones, con el fin de desarrollar una verdadera solidaridad contra los opresores.
Signatarios
☆ Alternativa Libertaria/ Federazione dei Comunisti Anarchici (AL/FdCA) – Italia
☆ Αναρχική Ομοσπονδία - Anarchist Federation – Grecia
☆ Aotearoa Workers Solidarity Movement (AWSM) – Aotearoa / Nueva Zelanda
☆ Coordenação Anarquista Brasileira (CAB) – Brasil
☆ Devrimci Anarşist Federasyon – Turquía
☆ Die Plattform - Anarchakommunistische Organisation – Alemania
☆ Embat - Organització Llibertària de Catalunya – Cataluña
☆ Federación Anarquista de Rosario (FAR) – Argentina
☆ Federación Anarquista Uruguaya (FAU) – Uruguay
☆ Grupo Libertario Vía Libre – Colombia
☆ Libertäre Aktion – Suiza
☆ Melbourne Anarchist Communist Group (MACG) – Australia
☆ Organisation Socialiste Libertaire – Suiza
☆ Organización Anarquista de Córdoba (OAC) – Argentina
☆ Organización Anarquista de Tucumán (OAT) – Argentina
☆ Roja y Negra - Organización Política Anarquista – Argentina
☆ Tekoşina Anarşist – Rojava
☆ Union Communiste Libertaire – Francia & Bélgica
☆ Zabalaza Anarchist Communist Front (ZACF) – Africa del Sur